En España, según el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, en 2024 se registraron 1.415 nuevas autorizaciones de licencia de taxi, hasta alcanzar un total de 62.398.
Esta profesión se enfrenta a varios obstáculos fundamentales para la supervivencia de los conductores de taxi. La competencia con los VTC (Vehículos de Transporte con Conductor), los coches autónomos y, según Alberto, que trabaja como chófer en Mallorca, la baja remuneración.
"Si te pillas algún día libre no llegas a los 1.000 euros al mes", explica este taxista que, tras haber trabajado como recepcionista y en el sector de la construcción durante varios años, apostó por cambiar de oficio.
Trabajo estacional
Concretamente en las Islas Baleares, el gremio es muy dependiente del turismo extranjero, por lo que se puede considerar un empleo estacional. "En invierno se gana muy poco", confirma Alberto. Además, tienen unos horarios establecidos y 18 días máximos de trabajo, por lo que si se cogen algún día libre no les llega para cobrar ni siquiera el Salario Mínimo Interprofesional.
En cambio, "en verano se saca un poco de dinero más, en algunas ocasiones el doble, 1.500 euros para arriba", cuenta el chófer en una entrevista con el creador de contenido Adrián Martín en su cuenta de YouTube Sobre Emprendedores.
Profesión de taxista
Por lo tanto, considera que "sí vale la pena trabajar como taxista, no es un trabajo físico. Mis trabajos previos sí eran penosos. Aquí tenemos aire acondicionado, no está mal".
Eso sí, se deben trabajar muchas horas al día como chófer para llegar a cifras que permitan a los profesionales una remuneración suficiente para sufragar sus gastos. "Este taxi lo llevamos entre dos personas y podemos echar 10 horas al día cada uno", asegura.
Asimismo, los taxistas con licencia tienen que realizar una inversión muy importante para conseguir la autorización y poder operar el vehículo de transporte de viajeros en un lugar determinado. En Baleares la tarifa asciende a los 160.000 euros de media, según Capital Privado MB.
En cambio, según un dueño de un taxi también entrevistado por Adrián Martín, una licencia puede llegar a costar 300.000 euros porque "en el mercado hay poca oferta y el precio está yéndose a barbaridades".
Impacto de la IA
El futuro de este oficio es incierto, a su vez, por la evolución de los coches autónomos. Aunque ahora se limitan principalmente a Estados Unidos, a medio plazo puede dejar en el paro a miles de conductores profesionales en Europa y en España.
"Los coches autónomos suponen un riesgo para nuestra profesión, pero no solo para nosotros, sino para el resto de conductores. Camioneros, transportistas...", sentencia Alberto.
