“El Pacto de Estado contra la violencia de género no se puede quedar simplemente en la foto política de la firma”. Con esta exigencia, los sindicatos mayoritarios -Comisiones Obreras y UGT- han tomado la delantera a los demás agentes sociales y han presentado una batería de propuestas a PP y PSOE, después de que estos registrasen la semana pasada una enmienda en el Congreso para alcanzar un gran pacto para luchar contra esta lacra. Su medida estrella consiste en crear un permiso retribuido para mujeres maltratadas que se acojan a una excedencia por esta causa.

CCOO y UGT quieren eliminar los déficits detectados en la ley orgánica de protección integral contra la violencia de género del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Una ley que va a cumplir 12 años y que supuso “un gran avance”, en palabras de Comisiones Obreras. No obstante, desde las organizaciones sindicales critican la ausencia de decretos que regulen la norma durante este tiempo y la falta de inversión para hacer efectiva la ley.

UGT presenta sus propuestas contra la violencia de género #niunamenos

Ante esta situación, ambos sindicatos han elaborado un listado de medidas que deberían estar incluidas, a su juicio, en el Pacto de Estado. Para lograrlo, consideran esencial que todas las administraciones públicas, cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y demás especializadas participen de las negociaciones que tendrán lugar en el Congreso una vez se cree la Subcomisión que aborde el acuerdo.

Hasta allí llevará UGT una propuesta estrella que califica de “imprescindible” que consiste en un permiso o licencia retribuida por un periodo inferior a dos meses -similar al que tienen reconocido las funcionarias públicas que se acogen a una excedencia por esta causa-. Una medida para que la ausencia o baja médica de estas trabajadoras no computen como absentismo o bajas médicas.

En la misma línea, en el documento de CCOO Análisis y propuestas para combatir la violencia de género se demanda reconocer como “situación legal” de de desempleo la reducción de jornada de la trabajadora víctima con derecho a la correspondiente prestación, “evitando así la penalización económica que dicha reducción supone”.

Los déficits en el ámbito educativo

La LOMCE también ha hecho estragos en la lucha contra la violencia machista. Tal y como explica CCOO, la ley educativa vigente “ha empeorado” lo establecido en la anterior norma socialista. “Los libros de texto siguen mostrando evidencias claras de sexismo y no se han desarrollado suficientes materiales curriculares que reflejen y fomenten la igualdad efectiva entre mujeres y hombres”, asegura Carmen Heredero, responsable del Área de Educación del sindicato.

Tampoco se fomentan actuaciones para abordar educación afectivo-sexual integral en los colegios, ni se oponen en marcha los recursos necesarios para la erradicación de todas las formas de discriminación por motivos identidad de género, “elementos claves de una educación para la igualdad y contra la violencia de género”, denuncian.

Por ello, Heredero ha avanzado que el documento que le harán entregar tanto al Gobierno como a los grupos parlamentarios contiene la creación, en cada centro educativo, un departamento de igualdad y contra la violencia de género. “Como existe un departamento de Orientación, debería existir otro para hacer coeducación y coordinar todo el trabajo del centro”, aclara.

También demandan que se debe asegurar por norma la presencia en los Consejos Escolares de los centros de una persona encargada de impulsar medidas educativas que fomenten la igualdad real y efectiva entre mujeres y hombres.