La Sala Penal del Tribunal Supremo confirmaba este lunes la condena a Quim Torra, hasta la fecha presidente del gobierno de Cataluña, a un año y seis meses de inhabilitación especial para cargo público y a una multa de 30.000 euros por un delito de desobeediencia "reiterada y contumaz" a las órdenes de la Junta Electoral Central, que le instó varias veces a retirar del balcón del Palacio de la Generalitat y de otros edificios oficiales lazos amarillos y pancartas en favor de los presos durante la campaña de las elecciones generales de abril.

Las reacciones a la sentencia no se hicieron esperar y horas después se registraron disturbios en Barcelona y otras localidades catalanas, así como manifestaciones de protesta y, por supuesto, múltiples análisis en las redes sociales. Algunos, como el PP, Vox y Ciudadanos procuraban adjudicarse el tanto mientras otros brindaban a la salud de la justicia. En Podemos mostraban su disconformidad con el fallo del alto tribunal al igual que los afines, conocidos y anónimos, a la causa independentista.

Uno de los tuits que ha generado más polémica de todos los escritos para apoyar al expresident ha sido el de Sor Lucía Caram, la monja dominica —en teoría, contemplativa— que alimenta varias facetas públicas como escritora, locutora, tertuliana y cocinera, y que llegó a España desde su Argentina natal hace cerca de 30 años. Reside en el convento de Santa Clara de Manresa, en Barcelona, y en su faceta de catalana de adopción parece que le profesa una gran admiración a Quim Torra.

"Horas de injusticia"

Desde su cuenta de Twitter, Caram ha cuestionado la decisión judicial sin reparos, señalando su apoyo "a los demócratas que no juegan con las cartas marcadas":

No obstante, el detonante definitivo para el aluvión de críticas ha sido su segundo tuit, con foto incluida, en el que clamaba "por la democracia y el respeto" y quería hacer llegar al "president Quim Torra: mi apoyo en estas horas de injusticia":

El tuit de la religiosa no pasó desapercibido y decenas de tuiteros han afeado su respaldo a Torra, cuestionando que hable de "democracia" e "injusticia" cuando ha sido el Supremo quien ha dictado sentencia:

Esta no es, ni mucho menos, la primera polémica en la que se ha visto envuelta la conocida como monja indepe. Hace algunos meses llegó a comparar a los gobiernos europeos con Hitler por no acoger al Open Arms.

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