Agentes de la Policía, en la zona donde está el paquete sospechoso.

Agentes de la Policía, en la zona donde está el paquete sospechoso. EE Sevilla

Sevilla

Dos paquetes abandonados cerca de la Catedral de Sevilla activan el protocolo antiterrorista

Una decena de agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local se han desplazado a la zona aunque finalmente se ha descartado que fueran explosivos. 

20 marzo, 2024 18:07
Sevilla

Dos paquetes abandonados en la calle Tomás de Ibarra, cerca de la Catedral de Sevilla, han provocado un amplio despliegue de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. A la zona se han desplazado al menos una decena de policías nacionales y varios locales. 

La calle ha permanecido cerrada al tráfico y a los peatones en torno a media hora porque los agentes estaban a la espera de que llegaran los expertos en explosivos. Finalmente, no había tal amenaza y los agentes se han dispersado.

Según han contado fuentes del dispositivo a EL ESPAÑOL, el despliegue se debe a que España está en nivel 4 de alerta antiterrorista de los 5 que hay. Toda precaución es poca, aseguran.

A eso se suma que la Semana Santa se celebra en cuestión de días. Es un momento, confirman fuentes del dispositivo, especialmente sensible para este tipo de episodios puesto que hay mucha más gente en la calle.  

Los paquetes en cuestión estaban sobre un reborde en la trasera del edificio de Correos, que tiene fachada hacia la avenida de la Constitución. 

Bultos sospechosos

Los bultos sospechosos, cuentan los vecinos, estaban en ese mismo lugar desde primera hora de la mañana. Sin embargo, ha sido por la tarde cuando se ha dado aviso y se ha desplegado la Policía Nacional. 

Finalmente, tras la llegada de los expertos, se han desactivado el dispositivo contra paquetes bomba puesto que se ha comprobado que no habia amenaza real. 

Durante el tiempo que los agentes han permanecido en la zona un coche de la Policía Local ha cortado el tráfico justo antes del Postigo. Otro hacía lo mismo en la Casa de la Moneda.

Además de impedir el paso a los peatones y coches, los agentes han pedido en todo momento a los vecinos que no se asomaran a los balcones. Algunos comercios han decidido cerrar y, una hora después, no habían vuelto a subir la persiana.