Publicada
Actualizada

Los pájaros cantan, las terrazas se llenan, el polen sobrevuela como un escuadrón de aviones kamikazes… y Leticia Sabater saca videoclip. Definitivamente huele a verano. Yo no soy esa mujer es el título de su nuevo tema, que no ha tardado en generar todo tipo de reacciones en redes sociales.

Por si fuera poco, en mitad de la polémica por el posicionamiento de RTVE a favor de Palestina en Eurovisión, y la rueda de prensa de Melody, Leticia ha sacado a la luz toda su artillería.

"El año que viene voy yo y así ganamos Eurovisión ya", ha comentado la artista en un vídeo de TikTok en el que se mostraban declaraciones de la última representante española de la competición.

Se trata de una parodia de una canción de Paulina Rubio apodada con el mismo nombre, lanzada hace ya 24 años. Su versión de Yo no soy esa mujer es algo más eléctrica, acelerada y con un toque excéntrico, propio de su marca personal. Al inicio del peculiar videoclip, se aprecia a la estrella más disparatada del pop vestida con indumentaria de monja en mitad de una iglesia, por supuesto simulada con un croma.

Podría parecer que la elección del nuevo Papa ha despertado una devoción divina en Leticia. Todo lo contrario. La artista se desquita de todo su atuendo religioso a medida que rompe la canción, como símbolo de liberación feminista. Todo al ritmo de la letra “Yo no soy esa mujer, que no sale de casa, que te pone a tus pies, lo mejor de su alma, no me convertiré en el eco de tu voz”.

Una letra que indudablemente habla sobre un empoderamiento tras reafirmar su identidad. No quiere ser la sombra de nadie. Un exorcismo al machismo en toda regla. Una vez la canción llega a su punto álgido y Leticia se deshace de su hábito, se deja ver con una especie de armadura vikinga con pinchos, en mitad de la Iglesia. A continuación se sube a una moto, con unos pendientes de crucifijos, y comienza a recorrer el asfalto a una velocidad endiablada. Todo ello sin salir del croma.

Hay quienes han percibido su reinterpretación del himno feminista de Paulina Rubio como un ataque innecesario a la iglesia, al asociar a las monjas con mujeres reprimidas. "Qué necesidad de ofender a la Iglesia" o "Estás meando fuera de tiesto, deja a la religión en paz", son algunos de los comentarios que se han hecho ver en su última publicación en Instagram.

Por otra parte, la canción forma parte de todo tipo de perlas musicales en las que la rareza forma parte de su encanto. Por ello, muchos no se han dado por sorprendidos y disfrutan de la canción desde el humor que la caracteriza. Comentarios como "Habemus mama", "Letic-IA" o "Ave María purísima" han inundado las redes. No obstante, ha habido un reclamo que se ha repetido especialmente en las secciones de comentarios: "¡Leticia a Eurovisión!".

La cantante no ha tardado en pronunciarse al respecto, y promete presentarse a la próxima edición. Eso sí, si el vídeo llega a 50.000 likes. Aún así parece estar más que decidida, ya que en su cuenta de Tik Tok ha comenzado a anunciar sus bailarines oficiales para Eurovisión: los influencers Fabiana Sevillano y Pablo Vera.

De ser así, Leticia podría competir con Pablo Chiapella en el Benidorm Fest, competición que selecciona al representante español de Eurovisión. El actor también se ha comprometido a participar si cosecha un medio millón de seguidores en su cuenta de Tik Tok, logro que ya ha conseguido en apenas dos días.

Este competiría con su famoso Mandanga Style, canción de su personaje en la serie La que se avecina. "Medio millón de seguidores y lío a Ernesto a Sevilla para que venga", prometió Pablo en un vídeo que publicó el influencer Ceciarmy, al que dijo "Y tú vienes como DJ". Si se consuma el reto de Leticia, internet se dividiría en dos frentes, velando porque alguno de estos dos se convierta en el próximo Chikilicuatre en la próxima edición de Eurovisión.

Un factor determinante podría ser el carácter explícito de la canción de Pablo Chiapella, ya que el Mandanga Style contiene estrofas del tipo "Dime que te gusta, dilo, nena, te voy a dar salami aquí en la arena" o "Vente conmigo un rato al camarote, que estoy tomando el sol todo palote".

Ambos han movido ficha, y en caso de darse la gesta, parece que Leticia está más que dispuesta a llevar su música al estrellato europeo. Sea como sea, está claro que con este tipo de contenido en España es químicamente imposible aburrirse.