La botella de oxígeno y una pequeña sábana, los dos objetos encontrados este lunes por el buque oceanográfico Ángeles Alvariño, en la zona donde se busca a las niñas desaparecidas en Tenerife, pertenecen al padre de las dos menores, Tomás Gimeno, según confirman fuentes de la Delegación del Gobierno.

La investigación, por otro lado, trata de determinar ahora si este hallazgo puede aportar pistas nuevas sobre el paradero de las pequeñas. Los dos objetos serán trasladados al Servicio de Criminalística de la Guardia Civil en Madrid para su análisis. 

El hallazgo, adelantado por Nius, se ha produjo en torno a las 14.00 horas de este lunes dentro del dispositivo de búsqueda de las niñas que desaparecieron junto a su padre el pasado 27 de abril. 

14 de junio 

El buque oceanográfico está realizando la inspección marina en la zona donde la lancha de Tomás Gimeno fue encontrada a la deriva, a una milla náutica del Puertito de Güímar. Su misión es radiografiar el fondo marino con el sonar para tratar de identificar algún objeto extraño y, si es posible, subirlo a la superficie con el robot submarino. Ante estos últimos hallazgos, el buque, que planeaba terminar sus trabajados de búsqueda este martes, continuará con sus labores de rastreo hasta el 14 de junio, todo en función de cómo evolucione la búsqueda, informa Cadena Ser

En la investigación participan también efectivos de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO), sumando cada día a más de setenta personas de medios aéreos y marítimos, además de terrestres.

Sobre la investigación pesa el secreto de sumario y ha incluido varios registros en la finca de Tomás Gimeno, situada en Igueste de Candelaria, las últimas ocasiones contando con el apoyo de una unidad canina desplazada desde Madrid.