Muchas veces se tilda a las redes sociales de fomentar lo peor de la sociedad, pero en algunas ocasiones, como en esta, son capaces de extraer lo mejor. Hasta este martes, a Cristian le quedaban seis meses de vida. Este miércoles, su caso ha conmovido a un relevante empresario andaluz, quien se ha ofrecido para sufragar todos los gastos necesarios para intentar curar el tumor cerebral de este niño malagueño de siete años.

"Soy Cristian de Málaga, tengo 7 años y necesito vuestra ayuda". Eran las palabras desesperadas de una familia a la que solo le quedaba esperar un milagro a través de redes sociales. Habían agotado todos los recursos para salvar la vida de Cristian, su hijo, al que le habían diagnosticado un cáncer en una complicada zona del cráneo -concretamente, un tumor de tronco encefálico-. La única posible solución, un tratamiento con protones, solo aplicable desde dos máquinas en España, las cuales estarán, como mínimo, inoperativas hasta 2020.



"Se lo empezamos a detectar porque a finales de mayo, en un concurso de baile del colegio. Le disfrazaron y le pintaron los ojos", recuerda Nolia, su madre. "Por la tarde, comenzó a expresar molestias en un ojo. En la óptica nos dijeron que probablemente tenía alergia a la pintura. Le mandaron unas gotitas y se le quitó, pero a la semana se le empezó a desviar el ojo", prosigue contando.

Mediante un TAC de imagen, los facultativos se dieron cuenta de que algo no iba bien y decidieron ingresar al niño en el hospital. Los médicos comunicaron tanto a Noelia como a Adrián -su padre- que su hijo tenía un tumor. A partir de ahí, la joven pareja se puso en marcha atravesando toda una odisea de médicos y hospitales, en busca de una cura para Cristian.

La respuesta definitiva que los médicos les han dado fue completamente desalentadora. El tumor no es operable debido a la zona en la que se encuentra. Además, añadieron que le quedan seis meses de vida.

Sin remedio hasta 2020

Sin embargo, también les mencionaron una remota posibilidad de someter al pequeño a un tratamiento de protones, mediante una máquina de la que en España únicamente existen dos unidades, pero que ninguna funcionará hasta 2020. Otros países, como Italia, República Checa o Países Bajos, utilizan este tipo de máquinas, aunque con costes inasumibles para la familia malagueña.

Como si se estuviesen ahogando a pesar de tener la superficie casi a mano, decidieron contar su caso en redes sociales, mediante vídeos, buscando la máxima difusión posible y que sucediese algo extraordinario. Fue el pasado 23 de agosto.

Desde entonces, su caso ha ido difundiendo y conociendo por pantallas, televisiones, radios y periódicos. El Sevilla, cantante de Los Mojinos Escozios, el actor malagueño Salva Reina, o la plantilla del Málaga Club de Fútbol han expresado su apoyo a "Todos somos Cristian", el lema con el que tratan de ayudar al menor.

"Su vida no tiene precio"

Este mismo miércoles, según ha podido conocer Diario SUR, la familia ha recibido un soplo de esperanza para Cristian. Un reconocido empresario se ha ofrecido para sufragar todos los gastos necesarios de una posible intervención en el extranjero. Es, según el medio andaluz, dueño de una gran multinacional, aunque ha preferido no ofrecer su identidad.

"Conozco la situación y si tenemos que actuar lo haremos. Sea en Suiza, Suecia o República Checa, donde sea. La vida de un niño no tiene precio. Que la familia esté tranquila con esto", ha declarado al medio bajo anonimato.

Concretamente, el tratamiento que podría salvar la vida de Cristian es la protonterapia, una fórmula similar a la radioterapia pero mucho más precisa. Mientras que la radioterapia convencional se dirige a las células malignas del tumor, afectando también a las buenas, la protonterapia se puede dirigir directamente a las células perjudiciales. Su coste, según explica el medio, puede rondar los 80.000 o 100.000 euros.

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