Una niña de seis años, que había sido abusada sexualmente por su abuelo, tendrá que volver a repetir su declaración ante los Juzgados de Sagunto (Valencia). La misma, había sido grabada por una cámara especial hace más de tres años, pero, ahora, ha sido cuando la Fiscalía ha concluido que la declaración no estaba bien realizada. 

En el caso de violaciones a menores, los investigadores utilizan un sistema de cámaras Gessell, para evitar una doble victimización de los niños, ya que a esas edades suelen ser muy vulnerables. Tras revisar la prueba, realizada hace más de tres años, la Fiscalía ha observado que en la grabación se ve "únicamente una sala vacía de los juzgados de Sagunto y al fondo, una minipantalla donde se encuentra la niña, en teleconferencia, desde su habitación". 

La Fiscalía ha solicitado la toma de declaración de la menor durante la vista oral. Así, aunque ya han transcurrido tres años y que el desarrollo evolutivo de la menor dificulta que su relato sea idéntico al que realizó en un primer momento, la víctima tendrá que revivir su pesadilla. Según ha informado El Diario de Levante, los padres de la menor se han negado a que su hija sea sometida de nuevo a un interrogatorio. 

El abuelo de la niña se enfrenta a una pena de diez años de prisión por un delito de agresión sexual a una persona menor de edad. El hombre ha negado ser el autor de los hechos. Por tanto, será fundamental la declaración de la víctima, que ahora tiene nueve años.