En tan sólo 15 minutos cayeron 30 litros por metro cuadrado en la tarde del pasado sábado en Cebolla (Toledo). Tal fue la impresionante riada -tras el desbordamiento de un arroyo- en el municipio toledano, que una de sus vecinas permaneció durante 20 agónicos minutos agarrada en una ventana pasa salvar su vida. Isabel aguantó hasta que le pudieron las fuerzas, pero no pudo más y la riada la arrastró calle abajo hasta una farmacia. La espectacular secuencia fue grabada por otro vecino del pueblo.

Relato emocionado de una mujer que quedó atrapada en la riada de Cebolla

"Estaba sumergida en el agua y en el lodo. No veía nada. Fui arrastrada y me topé con la fachada de la farmacia y ahí ya supe que me tenía que agarrar a lo que fuera", ha explicado la víctima en declaraciones a Espejo Público. "El agua me sumergió y ahí pensé que se acababa todo".

El desbordamiento del arroyo Sangüesa por la enorme tormenta que cayó en la zona -provocando calles anegadas, viviendas inundadas y numerosos vehículos arrastrados por la corriente- pilló a la protagonista del vídeo cuando iba a cambiar de lugar el coche de su madre. 

"En ese momento el agua me llegaba a los tobillos, pero de repente me alcanzó más de la rodilla", ha explicado. Fue entonces cuando se agarró a la reja de una ventana -que está separada de la casa de su madre por un sólo metro-. Pero le fue imposible alcanzar la puerta, su salvación, mientras sus familiares desde dentro de la vivienda presenciaban la escena, ha recordado entre lágrimas la protagonista. 

La vecina sólo ha sufrido algunos rasguños por distintas partes del cuerpo Espejo Público

Tras 20 minutos -y mientras el agua no paraba de subir y correr cada vez con más fuerza- se soltó ya sin fuerzas de la reja y el agua la arrastró calle abajo. Entre lodo, troncos y cañas llegó arrastrada hasta una farmacia situada a unos 100 metros de la vivienda de su madre. Paradójicamente la puerta de la farmacia había sido reventada minutos antes por un coche que se empotró contra ella: la salvación de Isabel.

Pese al dramatismo de las imágenes la mujer sólo ha sufrido algunas magulladuras y rasguños por todo el cuerpo. "He vuelto a nacer", ha resaltado. Además, ha asegurado que tanto ella como su familia están siendo atendidas por médicos psicólogos después de la horrible hora vivida el pasado sábado.