Los padres de Lucía Vivar, la pequeña de 3 años que desapareció en Pizarra (Málaga) y cuyo cuerpo fue hallado en las vías del tren, han expuesto -cuatro meses después del suceso- las 20 dudas que les suscita el informe oficial elaborado por la Guardia Civil sobre las causas de la muerte de la pequeña. Y, por eso, han pedido nuevas diligencias de investigación

Los padres de Lucía consideran que existen dudas razonables en la muerte de su hija, del pasado 28 de julio. La niña desapareció por la noche, cuando jugaba con sus primos en una explanada junto al bar en el que sus padres estaban cenando, en la estación de tren de Pizarra. Su cuerpo fue hallado a la mañana siguiente a cuatro kilómetros de distancia, junto a las vías ferroviarias. 

De acuerdo al informe elaborado por la Guardia Civil, Lucía Vivar murió por el impacto de un tren que golpeó su cabeza. Los padres de la niña, no obstante, han presentado 20 aclaraciones al atestado del Instituto Armado

Por eso, los progenitores han pedido a la juez que investiga el caso, el Juzgado de Instrucción número 10 de Málaga, nuevas diligencias de investigación al cuestionar una serie de razonamientos que exponen los agentes en el informe de cómo sucedieron los hechos y donde confirman la hipótesis inicial de que su muerte fue accidental, según explica la agencia EFE.

Un bote de cloroformo

Los padres consideran que en el informe no se explica cómo la menor pudo hacer ese "arduo recorrido" sin ni una sola lesión en sus rodillas y mínimas y casi inexistentes en manos, brazos y piernas.

Los padres y el abuelo de Lucía Vivar, en una comparecencia reciente ante los medios. EP

También les sorprende que no se investigue la aparición de un bote de cloroformo a escasos metros del lugar de la desaparición y el coche que estuvo aparcado en la zona, vehículo que podría coincidir con el que un testigo manifestó ver a alta velocidad en dos ocasiones por el pueblo.

En el escrito presentado ante la juez instructora recuerdan además que el grupo de profesionales que rastreó la zona no halló durante más de cuatro kilómetros "ni un solo indicio de que la niña hubiese andado por allí".

Así como que no hay ADN de la pequeña en ninguna de las muestras analizadas de los bajos del tren y no existe estudio histopatológico de las heridas, por lo que se preguntan quién les garantiza que las mismas las haya producido el tren.

Para la familia lo que sucedió a trescientos metros del lugar de aparición del cuerpo sin vida de la pequeña "es un cúmulo de interrogantes a los que ninguna diligencia practicada da respuesta".

La petición de la familia

Por todo ello, piden que se remita la totalidad del procedimiento a la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil para que lleven a cabo una investigación que busque dar respuesta a la "multitud de interrogantes" que aún existen.

Las vías del tren que, de acuerdo al informe oficial, debió recorrer la niña en la noche de su desaparición. G. Araluce

Así como se mande un oficio a la Policía local de Pizarra a fin de que informe de la realidad del hallazgo de un bote de cloroformo y que se busquen huellas dactilares.

Por otra parte, piden que se lleve a cabo a través de los investigadores la geolocalización de los teléfonos móviles encendidos en la zona donde desapareció la pequeña y se identifique a los titulares y su participación o no en la búsqueda.