
Una mujer se aplica protector solar en el rostro
La mejor rutina de belleza cuando luce el sol en A Coruña: el protector solar, imprescindible
El skincare es una rutina diaria que consiste en aplicar una serie de productos para mantener la piel sana, hidratada y protegida de los agentes externos
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Una rutina de skincare básica suele incluir limpieza, expoliación, aplicación de tónico, sérum, contorno de ojos, crema hidratante y protección solar. A la hora de cuidar la piel también es importante tener en cuenta cuáles son sus características para saber qué productos usar, una piel grasa no tiene las mismas necesidades que una piel seca o mixta.
El skincare o, lo que viene a ser lo mismo, el cuidado de la piel es una rutina diaria que consiste en aplicar una serie de productos para mantener la piel sana, hidratada y protegida de agentes externos como la radiación solar, la contaminación y las temperaturas extremas.
La rutina de skincare, paso a paso

Una mujer se aplica crema hidratante en el rostro
¿Qué necesito para hacer una rutina de skincare? En primer lugar, debes tener claro qué tipo de piel tienes (normal, grasa, seca, mixta o sensible) y ya después podrás elegir los productos para el cuidado facial diario de la piel, porque efectivamente, para ver resultados es muy importante ser constantes.
Con esto en mente, a continuación te contamos cómo podría ser una rutina de skincare completa pero sencilla para que tu piel luzca radiante esta primavera.
1. Limpieza
En rutinas para piel grasa o mixta, la mejor forma de eliminar el exceso de sebo -que puede causar problemas como acné y piel grasa- es utilizando un astringente, mientras que en rutinas para piel seca, la recomendación es emplear un limpiador suave que no elimine la barrera lipídica de la piel. Para limpiar el rostro, masajea con movimientos circulares y enjuaga con agua tibia. A continuación seca con una toalla limpia, dando toques suaves y ligeros, en lugar de frotar, ya que esto puede irritar la piel.
2. Exfoliación
Exfoliar la cara ayuda eliminar células muertas y desobstruir los poros. Es una rutina completamente necesaria para disfrutar de un cutis sano. La frecuencia de este paso de la rutina de skincare depende de cada tipo de piel, si bien por lo general se recomienda una o dos veces por semana.
3. Aplicación de tónico
El tónico facial es un producto de belleza que se aplica sobre el rostro después de la limpieza y antes de la crema hidratante y protector solar. Ayuda a refrescar y mejorar la luminosidad de la piel, y se aplica con un disco de algodón o con un pulverizador. Para tener el cutis en perfectas condiciones, existen tónicos hidratantes para pieles secas, astringentes para pieles grasas, refrescantes para pieles normales o mixtas y calmantes para pieles sensibles.
4. Sérum
Tan importante limpiar el rostro como aplicar un sérum facial. Este producto presenta múltiples beneficios para la piel: hidrata, ilumina, combate manchas, previene el envejecimiento y un largo etcétera. No obstante, el sérum no sustituye la acción de la crema hidratante, solo la complementa.
5. Contorno de ojos
Aunque a veces pase desapercibido, el contorno de ojos debe ser un imprescindible en toda rutina de belleza. Es la zona de la piel que rodea los ojos, por tanto muy delicada y sensible. Requiere un cuidado especial para nutrir y revitalizar la piel, retrasando algunos signos de envejecimiento como arrugas, líneas de expresión, bolsas y ojeras.
6. Crema hidratante
Antes de finalizar la rutina de skincare es casi obligatorio aplicar una crema hidratante que proporcione a la piel una mayor nutrición. Esta loción está diseñada para aportar minerales y vitaminas a la piel del rostro, y para protegerla durante todo el día. En el mercado existen varias texturas de cremas hidratantes y fórmulas para el uso diurno y nocturno, algunas con color y otras más naturales.
Calma la piel sensible, combate el envejecimiento, favorece la renovación natural celular, contribuye a ralentizar la evaporación de la humedad de la piel... Son algunos de los principales beneficios del uso diario de la crema hidratante. A la hora de aplicar la crema, se aconseja extenderla con movimientos suaves y circulares, siguiendo la forma natural de la piel.
7. Protector solar
Con el aumento de las horas de luz y el incremento paulatino de las temperaturas, el uso de protección solar es fundamental para proteger la piel del daño que causan los rayos ultravioleta (UV) del sol. No obstante, se recomienda usarlo todo el año, incluso en días nublados y en invierno.
Incorporar el uso del protector solar a la rutina diaria es una forma realmente efectiva de proteger la piel y prevenir posibles problemas de salud a largo plazo.
A la hora de elegir crema solar con un SPF (Factor de Protección Solar) se debe tener en cuenta el tipo de piel y también el tipo de actividad que se va a realizar. Hay que aplicarlo con antelación, entre 15 y 30 minutos antes de la exposición al sol para que la piel pueda absorberlo adecuadamente.