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Opinión

¿Estamos preparados para vernos las caras?

La proliferación de los trastornos mentales cada vez es más preocupante.
Verónica Rey
Por Verónica Rey

Hoy nos volvemos a ver las caras y, con ello, como si no fuesen pocos los síndromes que tenemos, amanecemos con uno nuevo: el de la "cara vacía", o eso dicen.

Las prácticas clínicas tanto en psicología como en psiquiatría forman parte de todo un entramado que incluye la investigación científica, la industria farmacéutica, el estatus de los profesionales implicados, la política sanitaria, la cultura clínica y, por supuesto, la sensibilidad de los pacientes.

En los últimos tiempos, la proliferación de los trastornos mentales cada vez es más preocupante. Vivimos en una época en la que se escucha más al fármaco que al paciente.

La palabra síndrome se refiere al conjunto de síntomas que definen una enfermedad. Un conjunto de síntomas que se suelen agrupar pero que todavía no forman un trastorno.

Existe una inmensa variedad de síndromes perfectamente identificados; Síndrome de Down, Asperger, Estocolmo, etc… y, como nos deben saber a poco, hoy se habla del de la cara vacía.

Como decía, la palabra síndrome se refiere a un conjunto de síntomas que están asociados a una reacción patológica y aunque en la vida cotidiana utilicemos la palabra síndrome de una forma más o menos amplia, pienso que no es recomendable darle esta categoría de síndrome a un conjunto de reacciones que pueden ser normales y transitorias, como el miedo y la ansiedad, en el momento en el que nos vemos las caras.

Cada una de las reacciones emocionales que podemos tener desde hoy en adelante entran dentro de la normalidad.

Si nuestro cuerpo se pone en alerta cuando percibimos cualquier cambio, es que funcionamos perfectamente.

Para que los efectos emocionales derivados de la retirada de la mascarilla, como por ejemplo el miedo al contagio, se pudiesen considerar como una patología, deberían de provocar en la persona una alteración de su vida cotidiana pero además, de forma crónica, no transitoria.

"Me puedo contagiar, la gente es una inconsciente, me siento desprotegido", son algunos de los pensamientos que pueden aparecer al salir a cara descubierta. Si los piensas es que ¡estás sano! No hay de que preocuparse, el estrés deja huella, y poco a poco irás recuperando la confianza.

Verónica Rey
Verónica Rey
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Directora del centro In&Out Psicología. Cuesta de la Unión N3 1c (A Coruña). Licenciada en psicología por la universidad de Santiago de Compostela con 14 años de experiencia profesional. Psicóloga especialista en infantes y adolescentes, adultos y terapia de pareja. Máster en psicología congnitivo-conductual y Terapia Breve estratégica. Terapeuta del Programa de Violencia de Género del colegio de psicólogos de Galicia.