StreetViewCompostela: Captar el arte del costumbrismo santiagués en la era digital
Doug Rickard, Michael Wolf o Jon Rafman son algunos de los fotógrafos que revolucionaron el panorama fotográfico a raíz de sus trabajos a través de la herramienta Street View de la que dispone Google Maps. Sara, estudiante de Historia del Arte en la USC, conoció el trabajo "Nine eyes" de Rafman durante una clase en la facultad y se le vino a la cabeza la idea de crear una cuenta de Instagram con las escenas que capta el coche de Google a su paso por la capital gallega.
Así comenzó @streetviewcompostela, una cuenta que "empezou hai dous anos como un estilo de diario para a xente do meu entorno" y ahora tiene alrededor de 1.100 seguidores. Sara confiesa que le entró vértigo al ver como crecía la cifra y que había gente pendiente de lo que ella subía. "Sentín a presión de buscar intres máis interesantes", cuenta entre risas.
El proceso que sigue para elegir los momentos que quiere capturar se basa en "soltar o boneco nalgún lado no que sei que non estiven e comezar a andar polas rúas, tratando de encontrar algo que chame a atención". El desarrollo artístico que sigue es muy parecido al que haría un fotógrafo a pie de calle: fijarse en algo y capturarlo con la mayor naturalidad posible.
"Momentos moi puros"
La diferencia es que, en vez de un fotógrafo, la toma está hecha por un automóvil que lleva un palo con nueva cámaras encima. "É unha furgoneta que pasa por alí e saca fotos indiscriminadamente a todos, que é algo moi obxectivo e que captura a realidade", comenta, a lo que añade que "son imaxes ou momentos moi puros". Y no le falta razón, porque el Street View capta el mundo tal y como es.
De todos modos, Sara reconoce que a veces se siente un poco "impostora" por idealizar la vida de las personas que salen en las tomas que sube a su cuenta en Instagram. Ella no sólo reproduce lo que ve en el Street View, sino que también compone la imagen para que sea estética: "as fotos están deshumanizadas, non hai un senso de composición ou retoque, eu o que intento é darlle un sentido éstetico as imaxes", expone la joven.
Con todo, la estudiante de Historia del Arte en la Universidad de Santiago de Compostela cree que "la ciudad picheleira" y su periferia son enclaves estupendos para descubrir un ambiente único que se mueve entre lo urbano y lo rural. "Interésame moito o choque urbano co rural, as interaccións que se crean entre os dous e Santiago é un lugar no que pasa moito", especifica la universitaria. No hay que irse a muchos kilómetros de la zona vieja de Santiago para encontrarse con la Galicia rural y a raíz de esto, Sara muestra el perfil de Instagram de @aldeasgalas, que ilustra exactamente esta composición entre ambos mundos.
Al ser una ciudad pequeña, hay gente que se reconoce en las fotos o reconoce a las personas que salen: "houbo varias persoas que se recoñeceron nas fotos, ou recoñeceron á súa familia ou a persoas coñecidas", indica. Algo que le hace especial gracia y le gratifica porque, según cuenta, "se ha pasado horas y horas buscando imágenes delante de la pantalla".
