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El Concello de Santiago de Compostela propone el casco histórico como Zona de Bajas Emisiones

La contorna del Restollal también se podría incluir en la ZBE en un futuro
El alcalde de Santiago, el concejal Gonzalo Muiños y Eduardo Díaz
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El alcalde de Santiago, el concejal Gonzalo Muiños y Eduardo Díaz

El gobierno local de Santiago de Compostela ha aprobado esta mañana de lunes el proyecto de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE). La medida era una obligatoriedad bajo la Ley de Cambio Climático, que obliga a todas las ciudades de más de 50.000 personas a realizar un estudio de la calidad del aire y delimitar zonas en las que se tomarán medidas para reducir el tráfico y las emisiones antes del 31 de diciembre.

La estrategia de cambio climático se irá implementando según dicten las normas generales del Estado, todavía pendiente de aprobación, según explicó el alcalde en la rueda de prensa al terminar la Junta de Gobierno Municipal. El regidor estuvo acompañado por Eduardo Díaz, encargado de redactar el proyecto, y Gonzalo Muiños , el concejal de Movilidad.

Díaz explicó que para redactar la iniciativa se hicieron una serie de análisis con los proyectos ya en marcha, como el Transfair, en el que participa la USC con otras ciudades europeas y que estudia la contaminación en Santiago. El resultado del análisis es que "la calidad del aire en Santiago es buena", y por ello a la hora de diseñar las zonas de bajas emisiones, se centraron más en la mejora de la movilidad y el avance contra el cambio climático.

La solución queda en una zona principal de bajas emisiones, el casco histórico del centro de Compostela, que tienen como prioridad conservar el patrimonio y continuar la descarbonización del enclave que "ya tiene implementadas distintas medidas de bajas emisiones". Estas estarán complementadas con el trabajo que ya se ha realizado con Smartiago para implantar control de acceso de vehículos, supervisión y control de accesos en aparcamientos y paneles informativos.

La otra zona que se podría ver afectada por estos cambios sería la contorna urbana del Restollal, donde se valoran actuaciones de mejora para después establecer una nueva ZBE. Díaz recordó que ya hay una subvención solicitada para llevar a cabo el proyecto, con lo que se le da "solución a una de las exigencias de la propia orden''. Una vez que esté en marcha, y haya una serie de condiciones que marca el propio Ministerio se avanzará."

Díaz también precisó que durante todo este proceso, al igual que con el nuevo Plan de Movilidad Urbana Sostenible, se dará cumplimiento "a todo lo referido a la participación ciudadana y la implicación de los agentes afectados". "El proyecto está aprobado, por lo que se da cumplimiento a la ley, y a partir de ahí se analizarán los pasos con más detalles a medida que avance la legislación".

Por su parte, el concejal Gonzalo Muiños quiso tranquilizar a los ciudadanos señalando que "os veciños e veciñas non van ter que mudar os vehículos. Teñen garantido o paso na zona", de la misma manera que los distribuidores. Las zonas de bajas emisiones son algo que "ven para quedar" , pero que se irán implantando de manera gradual, y durante el proceso se incluirá un "periodo de prueba" con información previo.

Bugallo volvió a insistir en que desde el Gobierno central se han anunciado los objetivos pero no están "marcados" lo que obliga a esperar a que el Ministerio publique un decreto que establezca los plazos y las condiciones. El alcalde añadió que desde la corporación se están trabajando tanto en la delimitación de las zonas y en el análisis de otros elementos contaminantes.

Recordó que "temos en marcha o PMUS, que é o que ten que dar acubillo a todo este conxunto de medidas" y que además se va a "pór en marcha o Centro Loxístico de Reparto de mercadorías para dispor dunha estrutura que posibilide organizar o reparto de mercadorías na cidade Histórica con vehículos menos contaminantes. E a través de Smartiago dispomos dos elementos de control específico para garantir que á normativa que se elabore, se lle poida dar cumprimento".

El alcalde destacó que la prioridad de la ciudad era "priorizar a mobilidade peonil, o uso do transporte público, e a aposta por medios de transporte máis blandos, como a bicicleta". La nueva ordenanza de movilidad no entraría en vigor hasta el año 2024.

Otros temas de la junta de Gobierno local

Además de aprobar el proyecto de ZBE, el gobierno local también ha anunciado la licitación de dos parques infantiles en Pérez Lugín y la Almáciga, con un presupuesto de 56.930,78 euros y 85.771,82 , respectivamente.

En fase inicial también se ha aprobado el plan de infraestructura para la creación de la plataforma logística del intercambio de mercancías en el polígono del Tambre, así como el proyecto de expropiación de 40.000 metros cuadrados para una "continuación de Mercagalicia". Este último, según el alcalde, permitirá "moitas sinergias" con el resto de empresas del área ya que tendrán las mismas entradas y salidas.

Finalmente, el Gobierno local ha aprobado el Plan Especial para la rehabilitación del convento de Conxo, que incluye la antigua iglesia, el psiquiátrico y el monasterio. El proyecto se centrará en la conservación patrimonial y medioambiental del conjunto histórico, una zona "extraordinariamente singular" , en palabras de Bugallo. LA iniciativa incluye también la construcción del nuevo centro de salud. 

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