Carballo, candidata al premio "Hoja Verde" como el concello más ecológico de Europa

La "Hoja Verde" es el premio que se considera hermano menor del premio a la ciudad verde europea, que se otorga para a los municipios de menos de 100.000 habitantes para visibilizar el esfuerzo de localidades que llevan la delantera en cuestiones de respeto al medio ambiente y Carballo es uno de los municipios finalistas que opta a este premio que promueve la Comisión Europea.

Entre las 36 ciudades de 23 países diferentes, Carballo resultó ser uno de los 18 municipios seleccionados. A finales de mayo de 2020 tendrán que exponer los motivos por los que cada centro urbano considera que merece el reconocimiento y a finales de junio en Lisboa se entregará el premio al municipio seleccionado como ganador, que se considerará como ejemplar en cuanto a las buenas prácticas ambientales.

Desde Carballo, Iván Andrade explica a Quincemil cuáles son las transformaciones que experimentó el concello coruñés de cara a tomar la delantera en el respeto y cuidado del entorno natural. "Ha sido todo fruto de un proceso, así lo hemos reflejado en la memoria que enviamos a la Unión Europea", indica el concelleiro de Formación, Innovación e Emprego.

Su memoria pasó el filtro por un puñado de motivos que se expusieron en el escrito. "Hicimos mucho énfasis en la iniciativa de cambiar el alumbrado público a LED y también en las medidas que se toman al estar rodeados de un área que pertenece a la Red Natura. Por ejemplo, el proyecto de protección de la especie en peligro de extinción de la píllara das dunas anidando en las dunas de Razo-Baldaio.

Otra cuestión en la que se centraron, fue en trasladar el uso de energías renovables en instalaciones deportivas, donde emplean principalmente paneles solares, "somos también pioneros en el uso de calderas de biomasa". Un compromiso del Concello que tiene también su reflejo en el hecho de que Carballo pertenece a la red Ciudades que caminan y a la red de ciudades contra el cambio climático.

"Pusimos en valor el trabajo del concello en mejorar y priorizar la movilidad de los peatones. En Carballo hay puntos de recarga para vehículos eléctricos, uno de ellos, para dos coches, que es de carácter público", explica Iván Andrade. Otra medida a la que alude el concelleiro es la prohibición de circular a más de 30 kilómetros hora en el casco urbano: "Al principio fue una medida impopular, pero con el paso del tiempo se han ido viendo sus beneficios".

Andrade se refiere al huerto ecológico infantil como una de sus medidas estrella. "Estamos acostumbrados a hablar de huertos urbanos, pero en Carballo hay un programa para que los niños y niñas en edad escolar aprendan el ciclo de producción y cosecha agrícola", detalla el concelleiro.

Otra de las medidas de impacto es el programa Carballo Limpo, a través del que contratan a centros especiales de empleo para la limpieza de las calles y mantenimiento de jardines del concello de forma que personas con diversidad funcional se implican en las tareas municipales a través de un contrato de trabajo.

También llevan la delantera con un programa de compostaje en el hogar, "somos uno de los concellos pioneros en disponer de quinto contenedor en el que se recogen los residuos orgánicos" y con su plan de medición del gas radón: "Disponemos de un plan específico de medición de este gas, que en Galicia tiene alta incidencia por su morfología".

Desde el concello de Carballo están orgullosos de haber llegado a la fase final, ya que supone un gran impacto a nivel de imagen, sirve también "para que la población se de cuenta de que hay avances en este sentido". El mes de junio se conocerá el resultado de la evaluación, y si algunas de las iniciativas del Concello de Carballo se incorporan al manual de buenas prácticas europeas.