Los extractores de humo suelen ser caros y voluminosos, requieren instalación por parte de profesionales, y son difíciles de limpiar en profundidad. Además, hay cocinas pequeñas en las que no caben y tampoco hay muchas soluciones disponibles para los propietarios de caravanas, que tienen que soportar el humo, la grasa y los olores sin más opciones que la de abrir la puerta y las ventanas de su vehículo. En ese tipo de situaciones es en las que ha pensado el creador de AirHood, una campana extractora portátil ideal para espacios reducidos.

Se trata del joven diseñador francés Maxime Augay, que lleva perfeccionando el diseño de AirHood desde su etapa universitaria. Tras varios años, distintas versiones y un prototipo funcional, Augay ha lanzado una exitosa campaña de micromecenazgo en Kickstarter. Gracias a ella, en breve comercializará este ingenioso producto, todo diseño e innovación tecnológica.

Con unas dimensiones muy reducidas (33,2 x 22 x 14 cm) y menos de dos kilos de peso, AirHood incluye dos filtros pensados para cuidar tanto la limpieza como la salud. Y es que, muy a menudo, las altas temperaturas a las que se cocina la comida pueden hacer que los aceites y las grasas se conviertan en vapores tóxicos, potencialmente peligrosos a largo plazo.

Elimina vapores tóxicos

El primero, nada habitual en las campanas extractoras tradicionales, es un filtro de carbón activo. Un potente ventilador aspira el humo procedente de las sartenes y ollas que están al fuego y lo hace pasar por el filtro, lo que permite purificar el aire y eliminar elementos nocivos. El filtro dura hasta dos meses con un uso diario y puede ser reemplazado fácilmente con un recambio proporcionado por la misma empresa que comercializa el AirHood.

AirHood, complemento ideal para la cocina de una caravana AirHood Omicrono

Este filtro de carbón activo se combina con el filtro de aceite, que extrae las partículas de grasa del vapor causado por la cocción y la fritura, reduciendo los olores persistentes y evitando que se desarrolle la película amarilla y pegajosa tan habitual en las distintas superficies de la cocina. Se puede extraer de manera muy sencilla para su limpieza y permite el lavado en el lavavajillas.

El AirHood se venderá en dos versiones, con cable e inalámbrica, ambas con una cómoda asa y tres velocidades que van desde los 3.500 hasta los 5000 rpm. La opción con cable ofrece una potencia máxima e ilimitada y dispone de un espacio en el pie del dispositivo para recoger el cable.

El diseño es uno de los puntos fuertes de AirHood AirHood Omicrono

La opción inalámbrica de AirHood permite una gran flexibilidad. Su batería tiene una duración de hasta 100 minutos, suficiente para todas las comidas diarias. Por si acaso, la carga completa se consigue en menos de dos horas, un intervalo lo suficientemente corto como para poder cargarlo entre comida y comida.

Augay planea comercializar su invento en tres colores —naranja, blanco y negro— y ofrece precios reducidos para los que colaboren en su campaña de crowdfunding, que ya ha cumplido con creces el objetivo inicial. El precio final de venta al público será de 122 € (la versión con cable) y 150 € (la versión inalámbrica).

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