El azúcar, o más concretamente su exceso, se está convirtiendo en uno de los principales problemas de salud pública del siglo XXI. Sus consecuencias son desastrosas, desde la obesidad y la diabetes tipo 2 hasta otros grandes males como la demencia o el cáncer.

Ahora, gracias a un reciente estudio publicado en Proceedings of National Academy of Sciences, sabemos que existe una enzima capaz de protegernos de estos excesos.

La enzima protectora contra la toxicidad del azúcar

El estudio, llevado a cabo por la Universidad de Montreal (Canadá), asegura que existe una enzima llamada glicerol 3-fosfato fosfatasa (G3PP), que podría paliar estos excesos de azúcar a nivel celular, reduciendo así la probabilidad de que la toxicidad desencadenada por dichos excesos afecte a nuestro organismo.

La glucosa, el azúcar esencial de nuestro organismo, es necesario para una gran variedad de procesos fisiológicos. Sin embargo, el exceso de azúcar al que estamos sometiendo a nuestro cuerpo resulta perjudicial, interfiriendo en dichas funciones corporales.

Ahí es donde entra en juego G3PP. Y es que, cuando nuestro organismo detecta altas cantidades de glucosa, se disparan los niveles de la molécula glicerol-3 fosfato hasta llegar a un exceso, lo cual produce daños a nivel celular (incluyendo las células beta del páncreas, esenciales para liberar insulina y regular el azúcar en sangre).

La enzima que protege a las células del azúcar

Esta enzima, G3PP, tiene como misión romper el exceso de glicerol-3 fosfato (de ahí los nombres tan similares, pero una es una molécula y la otra es la enzima que la rompe), manteniendo a dicha molécula alejada de las células y protegiendo a estas de la toxicidad del azúcar.

Así lo comentan los investigadores:

“Al convertir la glucosa en glicerol, la enzima G3PP previene la formación y almacenamiento de grasa excesiva, reduciendo así los excesos de glucosa en el hígado, un factor importante para desarrollar diabetes.

Hemos identificado la enzima mientras buscábamos mecanismos que permitan a las células beta deshacerse de la glucosa en forma de glicerol. Este mecanismo también se ha encontrado en las células del hígado, y parece estar presente en todos los tejidos del organismo”

Así, los investigadores esperan que sus hallazgos puedan ayudar a desarrollar nuevas estrategias terapéuticas contra todo el grupo de enfermedades originadas en los excesos de azúcar: Obesidad, diabetes tipo 2, síndrome metabólico, e incluso la demencia anteriormente mencionada.

Por el momento, están investigando los activadores de la enzima G3PP, pero aún quedan por delante diversos ensayos clínicos antes de poder llegar a los ensayos con humanos.

Vía | Alpha Galileo.

Fuente | Proceedings of National Academy of Sciences.