Crean un material plástico que es posible moldear cuando se calienta, pero se queda rígido a temperatura ambiente.

¿Cuantas veces has intentado fundir plástico en casa para reparar algo o darle forma? seguro que en más de una ocasión, pero el resultado no siempre es bueno.

Ahora, el fabricante japonés especializado en resinas Polysis ha desarrollado lo que ellos llaman “haplafreely”, un plástico especial que se convierte en arcilla cuando se eleva su temperatura, por lo que es muy sencillo trabajar con él.

A simple vista y a temperatura ambiente no tiene ningún misterio, haplafreely puede parecer como un plástico cualquiera, sin embargo, con sólo calentarlo por encima de los 60 grados celsius, ya sea sumergiéndolo en agua o con una pistola de aire caliente, se vuelve un material perfectamente modelable.

Como si fuera arcilla o barro, se puede trabajar con él y cambiar su forma tantas veces como se quiera, ya que comienza a endurecerse de nuevo cuando baja de los 40 grados (siempre se puede volver a calentar, claro).

Según Polysis, tiene una resistencia a la tracción tres veces mayor a la del caucho tradicional y lo mejor es que es que no daña a los materiales sobre los que se coloca, así que puede ser fácilmente utilizado como plástico protector de cualquier elemento o, mejor aun, para crear bases estables y recubrimientos de productos con formas dispares.

Los japoneses ya comercializan el haplafreely en planchas cuadradas de 40 centímetros y 4 milímetros de grosor, así como en rollos mucho más delgados, llegando incluso a los 0.6mm. Su idea es continuar el desarrollo del material hasta conseguir plásticos modelables a temperaturas variables, de forma que también puedan ser utilizados en cadenas de producción.