Hace pocos días os hablamos de una granja que consumía un 1% del agua, un proyecto que podría dar comienzo a la industrialización de la agricultura. La industrialización, como en el resto de sectores, tiene como resultado inmediato la automatización de distintos procesos. Ahora, se han inventado una serie de robots que recogen la cosecha.

Un proyecto de la UE

Ya se había pensado en la recolección automática de verduras y frutas, pero muchas de ellas necesitaban cuidados especiales, especialmente en el momento de cogerlas. Pero un proyecto de investigación de la Unión Europea ha llevado a cabo el desarrollo de estos robots inteligentes y configurables con herramientas de manipulación avanzadas. Creo que lo mejor es que lo veáis:

Un equipo de granjeros producto de la tecnología punta

El proyecto, llamado CROPS (de cultivo), dio comienzo hace ya cuatro años y está a punto de culminarse. La idea principal de estos pequeños ayudantes es que dispusieran de un software totalmente actualizable, de fácil instalación y que les permitiera adaptarse a nuevas condiciones y productos. Sin duda, algo imprescindible y que dotará a estas máquinas de una mayor vida útil.

Los robots podrán llevar a cabo diferentes técnicas de recolección y cuidado, así como detección y clasificación de obstáculos y otros objetos para realizar su labor de la manera más exitosa posible.

Ahora mismo son muchos los prototipos en desarrollo, y se incluyen robots recolectores, de insecticidas, que quitan hojas muertas y otras muchas labores. En definitiva, todo un equipo de granjeros que no sudarán la gota gorda.

La implantación de esta tecnología ve sus principales obstáculos en el terreno en que trabajan. La tierra, por ejemplo, debería ser lo más plana posible, y cada una de las plantas debería de ser lo suficientemente accesible para todos los robots. Por tanto, también debería haber una transformación en el sembrado y demás.

Por ahora, estos granjeros mecánicos no son rápidos ni baratos, por lo que aún no superan la labor humana. Aún así, esta tecnología aún es joven y tiene mucho camino por delante.

Fuente |  CROPS