Si recordáis, el mes pasado la NASA envió tres teléfonos Android al espacio en una misión bautizada como PhoneSat. El objetivo es intentar demostrar que es viable fabricar satélites con tecnología reciclada de antiguos dispositivos de electrónica de consumo. Y parece ser que todo está funcionando perfectamente.

A pesar de que este era su principal objetivo, los tres satélites llamados Alexander, Graham y Bell han conseguido tomar fotos de la tierra desde su órbita y enviarlas de vuelta a las bases de la NASA.

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La tarea de enviar una imagen, por baja que sea la resolución, desde el espacio a tierra no es nada sencilla. En este caso, el bajo ancho de banda disponible y el estar operando en la banda de radioaficionados obligó a enviar las imágenes en pequeños paquetes que fueron transmitidos a diferentes estaciones en tierra y después unidos en un trabajo que ha llevado una semana.

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Esto ha servido además para que la NASA pudiese colaborar con aficionados a la astronomía y la radio, recibiendo durante una semana hasta 200 paquetes diferentes con los que han montado las imágenes finales.

La misión PhoneSat terminó el pasado 27 de Abril, cuando los satélites volvieron a la tierra y se quemaron en la atmósfera. Gracias a los datos obtenidos la NASA podrá empezar a estudiar la fabricación de tecnología espacial de bajo coste con electrónica de consumo reciclado, lo que podrá ayudar a hacer la investigación espacial mucho más económica.

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vía | NASA