Quizás no siempre seamos conscientes de ello, pero cada vez que instalamos un programa, este viene cargando consigo una gran cantidad de “equipaje”: carpetas, accesos directos, entradas en el registro, etc., los cuales no siempre desaparecen cuando el programa es desinstalado, llenando nuestra computadora de todo tipo de basura que al paso del tiempo puede acabar afectando su rendimiento.

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La forma “difícil” de evitar esto sería revisar la computadora tras desinstalar el programa para rastrear toda la basura que éste haya dejado y eliminarla manualmente, aunque hay un método mucho más cómodo y sencillo para lograrlo, y este es recurrir a las funciones que nos ofrece el programa Revo Uninstaller.

Esta aplicación gratuita contiene un desinstalador que se asemeja en apariencia a la opción de Instalar o desinstalar programas de Windows, pero que es mucho más potente, pues tras efectuar la desinstalación del programa seleccionado, procede a hacer un escaneo completo del sistema en busca de carpetas, archivos y entradas del registro que éste haya dejado, y al terminar nos da la opción de borrarlos a través de la misma interfaz. Todo esto nos ayudará a dejar nuestro ordenador más limpio y libre de archivos basura, casi como si nunca hubiéramos instalado aquel programa en primer lugar.

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La desinstalación cuenta con varios modos, yendo desde el modo Built-in, que solo ejecuta el desinstalador de cada programa sin efectuar escaneo posterior; hasta el modo Advanced, que si bien es el más lento, es el que realiza el escaneo más profundo. También da la posibilidad de crear un punto de restauración del sistema antes de comenzar con el proceso por si algo llegara a salir mal.

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Por defecto, todos los archivos y entradas del registro encontrados estarán sin seleccionar, de tal manera que habrá que marcar los que queramos borrar y luego usar el botón correspondiente para hacerlo; aunque también existe la posibilidad de seleccionarlos todos y eliminarlos sin más; que debo admitir que por comodidad es lo que yo siempre hago aunque no es para nada recomendable. 😛

Revo Uninstaller cuenta también con una versión Pro (de pago, aunque se puede probar gratis por 30 días) que proporciona un escaneo más profundo, una interfaz más organizada y algunas otras funciones extras, entre las que me gustaría destacar la de Desinstalación forzada, gracias a la cual se pueden eliminar programas que no cuenten con un desinstalador propio o borrar todo rastro de aplicaciones que hayan sido desinstaladas anteriormente sin haber usado Revo Uninstaller.

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Solo hay que indicarle a Revo Uninstaller Pro la ubicación de algún archivo o carpeta relacionado con el programa a eliminar, y a partir de él podrá empezar a hacer la búsqueda del resto de los archivos y entradas del registro que aún se encuentren en el sistema.

En resumen, tanto la versión gratuita de Revo Uninstaller como la versión Pro son de esas aplicaciones que al poco tiempo de usarlas se vuelven imprescindibles. La cantidad de funciones que ofrecen se extiende bastante más allá de la desinstalación y escaneo; si bien no me he puesto a explorar a fondo todas sus posibilidades por lo que me gustaría animarlos a probar la aplicación y contar sus impresiones.

Por cierto, ya que sería un tanto ilógico instalar un programa que sirve para desinstalar programas, les recomiendo empezar por echarle un vistazo a la versión portable que no requiere instalación (solo es necesario descomprimir la carpeta y hacer doble clic en el ejecutable).

Descargas:

1. Revo Uninstaller Portable
2. Revo Uninstaller (versión instalable gratuita)
3. Revo Uninstaller Pro