Un 'adorable robot' que imita al algodón, la solución de esta 'startup' para hogares y escuelas

Si la conversación en España vira a la cuestión de los robots humanoides, lo normal es pensar en dispositivos capaces de ver a través de las paredes, que se cargan a sí mismos y con una estética claramente industrial. Otros intentan un enfoque algo más agradable.

Es el caso de Fourier, una de las múltiples startups chinas que conforman el epicentro de la revolución de la robótica humanoide, desde un prisma mucho más cercano. Frente al enfoque industrial y atlético de otros robots, esta empresa ha lanzado un dispositivo centrado en las emociones y la cercanía.

Hablamos del Fourier GR-3, un robot humanoide de 134 centímetros de alto con diseño amable, cuerpo redondeado y ojos expresivos, pensado para interactuar en hogares, escuelas u hospitales. Todo ello con un acabado casi exacto al algodón, y diseñado para ser 'adorable'.

Un robot para enamorar

La startup de Shanghái se ha alejado de los diseños estéticos que han marcado a los robots humanoides más industriales, sin renunciar a aspectos tecnológicos. Y es que su Fourier GR-3 es un robot modular, al que se le pueden intercambiar piezas.

Todas sus funciones son personalizables, e incluso se ha diseñado una variante 'de escritorio' para quienes buscan un compañero virtual. Este es un enfoque muy similar al que otros robots de la empresa han tenido, como los Fourier GR-1.

Alex Gu, fundador de Fourier, expone que el éxito de estos robots dependerá de sus usos finales, así como de sus costes razonables y la capacidad de los mismos para generar vínculos emocionales en la sociedad. De hecho, este robot estará destinado a hogares y escuelas, con interacciones sociales con menores y jóvenes.

Muestra de ello es su reducida altura de 134 centímetros, muy inferior a la de sus hermanos, los GR-1 y GR-2 que integran hasta 175 centímetros de altura. Esta altura ayudará a implementar a este Fourier GR-3 de forma más eficiente en espacios públicos e instituciones.

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El GR-3 por su lado puede transportar 3 kilos de peso máximo y se vale de seis cámaras RGB con sistemas de navegación 3D para moverse. Todo ello se conjunta con un sistema de interacción emocional basado en LLM, con actuadores inteligentes FSA para entregar 230 Nm de torque.

De momento el robot no ha sido presentado, pero podemos fijarnos en las especificaciones de su predecesor, el GR-2 que contaba con 52 grados de libertad, manos con 12 grados de libertad y sensores táctiles y actuadores de alta densidad FSA 2.0.

Gracias a sus sistemas de IA, el GR-3 que ya ha sido anunciado pero no presentado oficialmente reconocerá el entorno y adaptará sus tecnologías de movimiento y detección para cada caso de uso.