Una de las mayores polémicas relacionadas con Apple de los últimos años tuvo que ver con su insistencia por usar un teclado de tipo "mariposa". Las ventajas que prometió en su día eran evidentes: al variar el mecanismo interno de cada tecla, era posible reducir el grosor del portátil a niveles nunca vistos.

En la práctica, el teclado mariposa ha sido odiado por millones de usuarios, tanto por su tacto como, especialmente, por una fragilidad que la propia Apple conocía. Las soluciones para el teclado mariposa no hicieron nada por cambiar esta opinión popular.

Finalmente, Apple no tuvo más remedio que aceptar la derrota y volver al teclado clásico, también conocido como de tipo "tijera". Pero Apple no tiene por qué conformarse con eso.

MacBook con teclado mecánico

El youtuber Squashy Boy ha demostrado que hay otro camino: apostar por los teclados mecánicos. Bueno, más que demostrar, nos ha recordado que esa es una posibilidad, ya que su implementación tiene sus limitaciones.

Su idea es que los MacBooks usen teclados mecánicos, que son los favoritos de millones de jugadores y trabajadores de todo el mundo gracias a su sensación táctil, su recorrido y su sonido.

Se dice que, una vez que pruebas un teclado mecánico, es imposible volver a uno de membrana; y aunque hay todo tipo de gustos, es indiscutible que los teclados mecánicos ofrecen unas sensaciones y un rendimiento que aún no se pueden imitar de otra forma.

Así que la idea de este youtuber ha sido, simplemente, meter un teclado mecánico de ordenador en el hueco del teclado de un MacBook. En concreto, ha optado por un diseño TKL sin teclas numéricas ni de dirección, que se conocen como teclados 65% como el genial Ducky One 2 Mini que pudimos probar en su día.

Los inconvenientes son evidentes: un teclado es tan grueso que impide que el portátil se cierre, por lo que inmediatamente pierde una de las características que lo hacen 'portátil'.

Cómo sería posible

Por supuesto, esto es sólo una prueba de concepto y no un producto comercial. Pero la verdad es que, si Apple quisiera, sería posible hacerlo realidad, y la clave está en una de sus últimas innovaciones.

Los nuevos procesadores M1 de Apple ofrecen una gran ventaja en eficiencia energética y tamaño comparados con los que usaba antes, gracias a usar la arquitectura ARM.

Aunque no hemos visto la diferencia en los nuevos MacBooks, ya que siguen usando el diseño anterior, los nuevos iMac demuestran lo finos que pueden ser los futuros portátiles de la marca. Esa ganancia se podría aprovechar para meter un teclado con un mayor recorrido, o incluso uno mecánico, algo que agradecerían especialmente los más entusiastas.

Por otra parte, no hace falta usar un teclado mecánico tradicional. Es posible crear teclados mecánicos de bajo perfil, como demostró Logitech con el finísimo G915. Los portátiles de Razer también usan la nueva tecnología óptico-mecánica, con un láser para detectar la pulsación y así ahorrar espacio y ganar rendimiento.