Una mujer jubilada consultando en el ordenador la herramienta ChatGPT.

Una mujer jubilada consultando en el ordenador la herramienta ChatGPT.

Omicrono

Una jubilada de 66 años utiliza ChatGPT por primera vez y queda asombrada: "Suena a ciencia ficción"

Elena, pensionista, acudió a una sesión de formación en tecnología en Vitoria, que le ha servido para preguntar a la IA cómo puede vender su local.

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En los últimos años se ha acentuado la brecha digital entre los jóvenes y los mayores. Aunque muchos se esfuerzan para entender cómo utilizar los smartphones o cómo navegar por internet, con la irrupción de la inteligencia artificial el reto es aún mayor.

Sin embargo, ya existen casos de personas ya retiradas que han empezado a utilizar ChatGPT para resolver dudas, facilitar trámites o directamente lograr inspiración.

Este es el caso de Elena Valcárcel, una mujer recién jubilada de 66 años que hizo una formación sobre inteligencia artificial en Vitoria en la que por momentos pensaba que se trataba de "ciencia ficción".

Tras bucear y darse cuenta de sus múltiples posibilidades, expresó que se había quedado asombrada con las respuestas cuando le pidió que le dijera cómo podía vender su lonja. "Me buscó los puntos fuertes de la zona y usó frases que a mí jamás se me hubieran ocurrido", narra.

Además, le dijo que el local está "en una zona en la que el futuro va a ser muy beneficioso por los negocios que se van a desarrollar allí". A lo que Elena reaccionó con sorpresa: "Yo no sé de dónde cogió la información, pero me quedé asombrada".

Anhela los autodiagnósticos

La protagonista de la historia acudió a los 'KZguneas', los espacios públicos de País Vasco para adquirir conocimientos en el ámbito digital y la Cadena Ser local de Vitoria recogió cuáles fueron sus impresiones tras la formación.

Aunque piensa que las respuestas de la herramienta de OpenAI le aportan más de lo que nunca hubiera imaginado, sueña con que en un futuro la inteligencia artificial sea capaz de realizar autodiagnósticos.

"A mí me gustaría mucho que se llegara a hacer un autodiagnóstico médico, que te conectes con tu centro de salud y con un par de aparatos sean capaces de diagnosticarte lo que puedas", pero dicen que no, que la cosa está ya bastante avanzada", imagina Elena.

En este sentido, considera que todo "suena a ciencia ficción, pero dicen que la cosa está ya bastante avanzada", por lo que se muestra optimista sobre las posibilidades de la inteligencia artificial en el sector sanitario.

Inquietud

En contrapartida, ha expresado sus reservas sobre los nuevos algoritmos, ya que por mucho que aporten, "las nuevas tecnologías nos inquietan y producen un poco de amenaza en nuestra vida", en alusión a la incertidumbre por el futuro y la brecha digital.

Por último, manifestó que quiere destinar su tiempo como jubilada a formarse, ya que por fin tiene tiempo para aprender ahora lo que no ha tenido tiempo durante muchos años.