El neurocientífico Mariano Sigman.
Mariano Sigman, experto en el cerebro, muy contundente sobre el inminente impacto de la IA: "Será un apocalipsis"
El neurocientífico ha recordado que la inteligencia artificial cumple órdenes de humanos y que son sus dueños los que presentan el verdadero peligro.
Más información: "Cuarenta veces más grande que el mayor edificio impreso en 3D del mundo": la obra de Qatar que cambiará la construcción
La inteligencia artificial es una herramienta que se ha convertido en el mejor compañero de trabajo o de estudio por su increíble capacidad para procesar información y facilitar tareas. Sin embargo, muchos expertos subrayan que un mal uso de los algoritmos entraña un grave peligro para la humanidad.
Mariano Sigman, neurocientífico argentino, es una de las voces críticas que, aunque aplauden el gran avance de la inteligencia artificial y todos sus beneficios en términos de productividad, afirma que si cae en las manos incorrectas "esto será el apocalipsis".
Así, considera crucial gestionar el pánico a la inteligencia artificial y a sus efectos desconocidos, porque si el pánico se apodera de la sociedad, "nadie se va a acercar a la inteligencia artificial, se alejarán, la tendrán los que no la tienen que tener".
Batalla sin cuartel
Esta advertencia se produce en un momento en el que los grandes directivos de las empresas tecnológicas como Elon Musk, Sam Altman o Mark Zuckerberg han comenzado una batalla sin cuartel para ser los propietarios de la inteligencia artificial más potente del mundo, sin olvidar a la china DeepSeek.
En Lo que tú digas, presentado por el periodista gallego Álex Fidalgo, varios expertos en ciencia, legislación y tecnología han participado en el programa '¿Debemos detener a la inteligencia artificial?', centrado en los riesgos y oportunidades de la IA desde distintas aristas.
A pesar de la pesimista explicación inicial, Sigman ha argumentado que hay que asimilar que los nuevos algoritmos son una realidad y que hay que afrontarlo con prudencia, pero lo más lejos posible de teorías que fomenten el pánico porque es "contraproducente".
Además, asegura que no es esencialmente mala, sino que la inteligencia artificial "hace evidente nuestros peores estigmas y sesgos, lo peor de nosotros". Por eso, recomienda ir un paso más allá y no poner el foco en el clásico debate de hombre contra máquina.
En cambio, señala que el peligro reside en que "funciona como un espejo que revela las debilidades y prejuicios de la propia humanidad" y que se alimenta de los "datos sesgados que los humanos le proporcionan".
El experto en el cerebro, en otro momento de la tertulia, explicó que si pudiera volver atrás en el tiempo 10 años, "pararía" el desarrollo de la inteligencia artificial porque considera que el mundo sería mejor si no se hubiera llegado a un progreso algorítmico tan exhaustivo.