La bancarrota de Gawker ha sido anunciada hoy, después de tirarse varios años enzarzada en problemas legales.

Los ames o los odies, los blogs pertenecientes a Gaswker son una de las referencias para todos los que estamos metidos en esto de escribir en Internet.

En la red puedes encontrar muchas críticas a su estilo, desde el abuso de clickbait, hasta su tendencia a crear polémica de manera innecesaria, su asociación con ciertos grupos de Internet, y la publicación de historias que son más propias de una revista del corazón que de webs serias.

Gakwer, una red de blogs que odias o amas

Pero pese a todos esos aspectos negativos (que en Omicrono no vamos a criticar porque no somos nadie para hacerlo), las webs de Gawker son de las más populares que te puedes encontrar en la red, sus artículos son de los más compartidos, y nunca publican nada que no conlleve debate y expectación. Y como escritor, no puedo sino admirar eso.

kotaku

Soy lector habitual de Gizmodo (dedicado a tecnología y cuya edición española es competidora directa de esta vuestra web) y de io9 (todo lo relacionado con el entretenimiento alternativo, en otras palabras, lo friki), pero como todo el mundo, he leído más de un artículo de Kotaku (videojuegos), Jalopnik (coches) y Lifehacker (trucos para la vida diaria).

No estoy nada familiarizado con Deadspin (deportes) o Jezebel (prensa rosa), pero mi argumento es que si has pasado algo de tiempo en Internet, es muy probable que hayas leído un artículo de esta red de blogs.

La polémica, una de las fuentes de la bancarrota de Gawker

gawker 2

Sin embargo, ese buen trabajo de los blogs (más o menos independientes) ha quedado mancillado en ocasiones por polémicas, tal vez innecesarias. Pero sin duda alguna, la mayor de ellas hasta ahora ha sido el juicio por la publicación de una cinta de contenido sexual protagonizada por el hombre conocido como Hulk Hogan (luchador de la WWE).

En las últimas semanas se ha descubierto que la demanda de Hogan fue apoyada económicamente por el millonario Peter Thiel, en venganza por una vieja publicación de Gawker en la que se revelaba su homosexualidad. Todo un culebrón que la mayoría hemos intentado evitar en la medida de lo posible.

peter thiel

El pasado marzo, el tribunal falló a favor del luchador y ordenó a Gawker pagar 140 millones de dólares por los daños económicos y emocionales sufridos. Un duro golpe, pero la compañía estaba dispuesta a apelar. Sin embargo, hoy el juez ha denegado esta posibilidad, y por eso Gawker  ha declarado la bancarrota.

Algo tal vez comprensible, teniendo en cuenta que gracias a la declaración sabemos que sus bienes valen entre 50 y 100 millones de dólares, a todas luces insuficientes para pagar la condena.

No sólo eso, sino que la declaración también declara unas deudas que pueden alcanzar los 500 millones de dólares. Por lo tanto, es pronto para decir que la demanda de Hogan y Thiel ha acabado con Gawker, pero sí que parece evidente que ha acelerado el proceso.

El futuro de Gawker y sus publicaciones ahora depende de la próxima subasta de bienes de la compañía. Dependiendo de quién se quede estos bienes, debería ser posible que las publicaciones continuasen adelante, pero mientras tanto el futuro pinta negro.

Tampoco está claro aún cómo afectará esta declaración de bancarrota a las versiones de los blogs en otros países, como Gizmodo España, pero seguiremos informando.

Actualizado: Carlos Rebato, editor de Gizmodo España, ha asegurado en Twitter que todo sigue como siempre, “sin novedades”.

Mientras tanto, en Omicrono queremos desear buena suerte a los editores y redactores de los blogs de Gawker.