Donkey Kong, además de ser uno de los personajes más reconocibles de Miyamoto para Nintendo, fue un juego que debutó en 1981 entre las máquinas recreativas. En el juego original Mario sólo era un personaje que saltaba, y teníamos que esquivar los obstáculos que nos lanzaba Donkey Kong para acabar con el y rescatar a la princesa. Después de eso Mario se llevó el protagonismo, dejando a Donkey Kong en un segundo plano, pero muchos adictos han seguido jugando a aquel juego de 1981 en nuestros días.

Estos jugadores, además de hacerlo por la diversión, han estado jugando todo este tiempo para superar el récord: en cada partida obtenemos una puntuación, y existe toda una comunidad obsesionada con conseguir la mayor puntuación posible. Las puntuaciones se han superado en varias ocasiones, hasta el punto de que existe un récord Guiness al respecto, y uno de los campeones de Donkey Kong afirma haber conseguido la puntuación perfecta.

Wes Copeland afirma haber conseguido “la partida perfecta”

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Wes Copeland es una figura destacada en este mundillo, el cual ha conseguido el récord hasta en tres ocasiones. Su puntuación máxima alcanzada en abril fue de 1.195.100 puntos, superando al récord establecido días antes por Robbie Lakeman (1.190.200), pero el propio Wes ha superado su puntuación un mes después. Y lo mejor es que Wes afirma que la nueva puntuación es “perfecta”, sin más.

El vídeo que tenéis debajo de estas líneas muestra la partida en la que Wes ha conseguido 1.218.000 puntos. Un nuevo récord mundial, superando a su propia puntuación de hace un mes. La cuestión es que Wes afirma que su puntuación es la puntuación “perfecta” de Donkey Kong, que no es posible conseguir una mayor porque en esa partida no perdió a ningún Mario. Y está tan seguro que ha comentado en Facebook que será su última puntuación, no cree que pueda puntuar más alto.

¿Conseguirá superar alguien este récord de Donkey Kong?

Tiene sentido retirarse si piensas que has conseguido la puntuación perfecta, y si es perfecta de verdad, su récord no se moverá de ahí jamás. Esperemos que Lakeman, su eterno rival en los últimos años, se tome este desafío en serio e intente superarlo.