Si eres un aficionado a los juegos retro, esta Game Boy original modificada te encantará: las maravillas que se pueden hacer con una Raspberry Pi.

En los últimos años hemos visto todo tipo de proyectos con Raspberry Pi que nos han dejado con la boca abierta (y con ganas de lanzar todo nuestro dinero contra la pantalla). Este no se queda corto: se llama Game Boy Zero y, pese a que exteriormente no parece nada fuera de lo común, el trabajo interior es espectacular.

A simple vista no es más que una Game Boy, con su diseño original, esa consola que tantas y tantas horas de diversión y entretenimiento nos ha dado en nuestra juventud (vale, y también siendo no tan jóvenes).

Más botones, conectividad, potencia… quiero una Game Boy así

Desde Sploid  vemos cómo un usuario muy manitas ha utilizado la carcasa de la Game Boy original para crear un proyecto personal al que sería muy difícil poner precio. La ha modificado para montar una pantalla a color más grande, y también ha dejado hueco para dos botones más.

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Así, ha diseñado y fabricado un nuevo pad de botones para controlar los juegos, le ha metido una Raspberry Pi que se encarga de poner la potencia necesaria para moverlo todo y un emulador con el que puede jugar a cualquier título de la NES, SNES y muchos de los juegos de la mayoría de versiones de Game Boy.

El cartucho ha sido modificado para meterle tarjetas microSD

Ahora bien, si lo anterior ya es impresionante, más aun es la modificación del cartucho. En él ha integrado un lector de tarjetas microSD y toda la circuitería que se conecta a la Raspberry Pi. A todo lo anterior se suma una batería recargable por microUSB, conectividad Bluetooth e incluso salida miniHDMI por si queremos echar las partidas en una pantalla mayor.

“Wermy”, que es el usuario que la ha creado, ha documentado todo el proceso con un montón de imágenes aquí, y en el vídeo superior podéis verla en funcionamiento. Ante esto solo puedo decir: TAKE MY MONEY!

Recordemos que la Raspberry Pi Zero es el modelo más enano y barato que jamás han lanzado y ahora comparte popularidad con la última Raspberry Pi 3, que integra Bluetooth y Wifi en la propia placa y ya se puede comprar.