Los programas de puntos de las operadoras son casi tan viejos como los propios teléfonos móviles. La idea es sencilla: para recompensar a los clientes mas fieles (y evitar que se cambien de compañía), estos pueden conseguir una serie de puntos que luego pueden canjear por grandes descuentos, o incluso por dispositivos gratis. Se supone que esto era un contrapunto a los programas de portabilidad, que permitían al usuario cambiar de móvil por poco dinero a cambio de un contrato nuevo con otra compañía. Los puntos eran la opción ideal si queríamos la renovación pero sin cambiar de planes.

Y hablo en pasado porque los puntos parecen ir de camino al purgatorio, donde acompañarán a otras maniobras de marketing usadas en los últimos años por las compañías. El mercado está cambiando, y lo que antes permitía a las operadoras lanzar grandes campañas de publicidad que atrajesen clientes, ahora ya no sirve para nada. El cliente ya no parece prestar atención a la sección de la factura en la que aparecen los puntos, sino que prefiere otros métodos para conseguir un móvil nuevo.

Tarifas Internet móvil

Si compañías como Yoigo ya plantearon esta renovación de terminal de una manera diferente, ahora es Movistar la que se suma al cambio. A partir del 18 de Septiembre, nuestros consumos con Movistar dejarán de generar puntos, si bien los que ya tengamos no desaparecerán y podremos seguir usándolos hasta nueva orden. Aunque aún no se ha producido el anuncio oficial, se espera que se sustituya por algún tipo de programa de fidelidad que comporte ofertas personalizadas para cada usuario según su historial de gastos, todo ello enmarcado en su programa “Por ser de Movistar” que nos permite acceder a diversas ofertas por ser cliente de la compañía.

¿Porqué están muriendo los puntos? Hay muchas razones, para ambos “bandos”. Por una parte, se podría decir que solo los usuarios con mas gasto realmente aprovechaban el sistema, ya que generaban la suficiente cantidad de puntos como para obtener un descuento aceptable en su renovación. Por tanto, para la mayoría de los usuarios era mas rentable cambiarse de compañía si realmente querían cambiar de smartphone.

Por su parte, al poder acumular puntos, las compañías acababan dando grandes descuentos a usuarios con consumos reducidos pero con mucho tiempo a sus espaldas como clientes, unos descuentos que luego no iban a compensar en sus gastos mensuales. Los puntos con caducidad solucionaron eso, pero eso implicaba que, de nuevo, muchos usuarios acababan perdiéndolos antes de poder reunir la cantidad necesaria, y simplemente se cambiaban de operadora.

No sabemos si las ofertas personalizadas suponen el siguiente paso de estos descuentos, pero si lo son deberían ser lo suficientemente buenas como para convencer a los usuarios (nada de dispositivos de gama baja que no quiere nadie), y al mismo tiempo que tengan sentido financiero para las empresas (con dispositivos acordes al uso y necesidades del usuario).

Fuente | Xataka Movil