Un avión Saab 340 AEW&C de la Fuerza Aérea Sueca equipado con el sistema de radar Erieye

Un avión Saab 340 AEW&C de la Fuerza Aérea Sueca equipado con el sistema de radar Erieye Pål Jonson X

Observatorio de la Defensa

Así es el avión sueco ASC 890 con el que Ucrania reforzará su espacio aéreo: detecta misiles y drones a 400 km de distancia

Estocolmo ha suministrado dos de estas aeronaves a Kiev, que operarán codo a codo con los cazas F-16 con los que ya cuenta la Fuerza Aérea ucraniana.

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Para contrarrestar con éxito un ataque es fundamental detectar la presencia del enemigo con la mayor antelación posible. Precisamente, esto es lo que planea hacer Kiev con los dos aviones ASC 890 de alerta temprana y control aerotransportado (AEW&C, por sus siglas en inglés) entregados recientemente por Suecia.

La llegada de las aeronaves ha sido confirmada por el propio ministro de Defensa ucraniano, Denis Shmihal, quien ha agradecido personalmente a su homólogo sueco, Pål Jonson, la donación del par de aparatos, durante un encuentro entre ambos.

Los sistemas están basados en dos aviones civiles Saab 340 a los que se les ha equipado un radar PS-890 AESA, con el sistema Erieye, montado longitudinalmente en una posición fija, lo que reduce la resistencia del aire.

Con este radar, la plataforma es capaz de explorar hasta 400 kilómetros a la redonda e identificar tanto aeronaves como embarcaciones, incluso en ambientes difíciles donde existen interferencias electrónicas o accidentes geográficos que complican la cobertura, logrando una observación constante.

Su papel central es actuar como nodo de mando aéreo, ya que detecta amenazas con antelación, desde aviones hasta misiles o drones, y transmite esa información a las unidades responsables de responder, ya sean cazas, defensas antiaéreas en tierra o centros de control militar.

Además, el ASC 890 facilita la organización del tráfico aliado, evitando conflictos en el espacio aéreo durante operaciones complejas y favoreciendo la coordinación entre diferentes ramas de las fuerzas armadas. En misiones navales también resulta clave, aportando datos sobre la posición de buques y reforzando la visión general de la situación marítima de las flotas en operación.

El dúo de aviones trabajará codo a codo con los F-16 que numerosos aliados han ido entregando a Ucrania desde el año pasado. El arribo de los ASC 890 se ha dilatado en el tiempo, justamente, por modificaciones en los cazas de origen estadounidense necesarias para asegurar la operabilidad con las aeronaves suecas.

En este sentido, las unidades AEW&C podrán enviar información de ubicación a los aviones de combate, que se transmitirá directamente a una pantalla en la cabina del piloto, lo que brinda numerosas ventajas a la hora de elegir cuándo y dónde combatir.

Cada aeronave presenta una longitud de 20,57 metros, una envergadura de 21,44 m y una altura de 6,97 m. Su peso vacío es de 10.300 kilogramos y tiene un peso máximo de despegue de 13.155 kg. Además, precisa una tripulación de seis personas para ser operada.

Avión de alerta temprana Saab 2000 con el radar Erieye

Avión de alerta temprana Saab 2000 con el radar Erieye Saab

Sus dos motores General Electric CT7-9B, de 1.870 caballos de fuerza cada uno, le permiten alcanzar una velocidad de crucero de 300 km/h y una autonomía de más de cinco horas. Su techo de servicio es de 7.620 metros.

Estocolmo incluyó la pareja de aviones de alerta en un paquete de ayuda valorado en algo más de 1.100 millones de euros, que también abarcó vehículos de combate Pansarbandvagn 302, misiles antiaéreos y proyectiles de artillería. Desde principios de año, personal de la fuerza aérea ucraniana ha estado recibiendo entrenamiento integral en Suecia para garantizar la operativa de los aviones.

Acuerdos industriales

En la reunión mantenida, Ucrania y Suecia han acordado la producción conjunta de materia militar en el territorio de ambos países, alianza que ha quedado reflejada en una carta de intenciones firmada por los ministros Shmihal y Jonson.

De esta manera, Kiev proporcionará tecnología a las fábricas en Suecia y el armamento coproducido en el país nórdico se exportará posteriormente a Ucrania. Al mismo tiempo, esta alianza industrial abre la posibilidad de que el material desarrollado sea adquirido también por las Fuerzas Armadas Suecas, según han explicado desde Estocolmo.

Los ministros de defensa de Suecia, Pål Jonson (I), y de Ucrania, Denís Shmihal

Los ministros de defensa de Suecia, Pål Jonson (I), y de Ucrania, Denís Shmihal Ministerio de Defensa de Ucrania

"Este acuerdo fortalecerá la base industrial de defensa de Suecia, Ucrania y Europa. Puede impulsar el rearme sueco y satisfacer las necesidades de las fuerzas armadas ucranianas", ha subrayado Jonson.

Sin embargo, los acuerdos industriales alcanzados por Kiev no se limitan únicamente a Suecia. El Gobierno ucraniano ha sellado, por ejemplo, un pacto con Lituania centrado en la producción conjunta de drones de largo alcance.

Así, ambos países buscarán oportunidades para el lanzamiento de empresas conjuntas, la expansión de las compañías ucranianas en Lituania y el intercambio de tecnologías. Cabe destacar que el país báltico prevé destinar el 0,25% de su PIB a la asistencia militar en favor de Ucrania hasta 2027.