Imagen ilustrativa de un misil PAC-3 del sistema Patriot
Estados Unidos firma un contrato récord de más de 9.000 millones con Lockheed Martin para misiles Patriot
Los patriots son utilizados por Ucrania para contrarrestar la ofensiva aérea rusa desde el inicio de la invasión.
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Estados Unidos acaba de cerrar un acuerdo multimillonario con Lockheed Martin, una de las mayores compañías de defensa del mundo, para la fabricación de misiles Patriot por un valor de 9.800 millones de dólares (9.016 millones de euros).
El acuerdo se produce en un momento en que la demanda de estos sistemas de protección está creciendo tanto dentro de las propias fuerzas armadas estadounidenses como entre varios países aliados.
Los Patriot son misiles interceptores diseñados para detectar y derribar amenazas aéreas, como drones, aviones o misiles enemigos. Su tecnología avanzada los ha convertido en uno de los recursos más solicitados para reforzar defensas en escenarios de conflicto o tensión internacional, como en Ucrania, que lo emplea para contrarrestar la ofensiva aérea rusa desde el inicio de la invasión.
Este contrato representa el mayor pedido de misiles Patriot realizado hasta ahora. Lockheed Martin se encargará de producir la versión más moderna de estos interceptores, conocida como PAC-3 MSE, un modelo diseñado para ser más ágil y preciso en la neutralización de amenazas aéreas.
El acuerdo incluye la fabricación de 1.970 misiles PAC-3 MSE, además de distintos equipos y componentes relacionados.
Cada uno de estos proyectiles tiene un precio estimado de unos 4 millones de dólares, según los documentos del Ejército estadounidense.
Además, los misiles PAC-3 MSE podrían ser incorporados al ambicioso escudo antimisiles Golden Dome que impulsa la administración del presidente Donald Trump.
El contrato prevé que la mayor parte de la producción se destine al Ejército de EE.UU., pero también a un grupo selecto de países aliados que buscan reforzar sus defensas frente a crecientes amenazas, incluidas las de misiles balísticos y drones de última generación.
Por su parte, la Marina estadounidense ha manifestado su intención de integrar los misiles PAC-3 MSE fabricados por Lockheed Martin en los sistemas de defensa aérea de sus buques de guerra, lo que ampliaría de manera significativa las capacidades navales frente a amenazas hipersónicas y de largo alcance.
Un mercado en auge
El contrato pone de relieve la creciente importancia de los interceptores Patriot en un contexto geopolítico marcado por la guerra en Europa y la competencia estratégica con potencias como Rusia y China.
Con este encargo, Lockheed Martin refuerza su posición como uno de los principales contratistas de defensa a nivel global y consolida al Patriot como pieza clave en los arsenales occidentales.