La cantante Malú en su paso por El Hormiguero.

La cantante Malú en su paso por El Hormiguero. Gtres

Estilo de vida

Malú, 43 años, sobre su cambio de vida tras 25 años de carrera: "Era enfermizo, me he hecho mucho daño"

Es una de las cantantes españolas de mayor éxito, por lo que sus impactantes declaraciones, han llegado a gran parte de su público.

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El pódcast de la onubense Vicky Martin Berrocal (52 años), A solas con, está cosechando un sinfín de éxitos. No solo por los invitados que acuden a charlar con ella, sino por el ambiente cálido y cercano en el que la diseñadora consigue impactantes declaraciones.

Una de sus últimas "visitas", fue la de la cantante Malú, todo un referente de la música española que se ha abierto en canal para hablar del precio del éxito y la exigencia extrema que la ha acompañado durante toda su carrera.

Sin artificios ni evasivas, Malú ha resumido años de lucha interna, del daño personal que esa entrega total le ha provocado en una sola frase: "Yo he tenido una exigencia muy enfermiza conmigo".

La artista explica que su perfeccionismo no era solo una cuestión profesional, sino una forma de vida que la devoraba poco a poco.

"Yo me he hecho mucho daño a mí misma", admite con la serenidad de quien ha aprendido, por fin, a mirarse sin culpa.

'Todo era para la música'

Durante la charla con Vicky Martín Berrocal, Malú recuerda los años más intensos de su trayectoria repletos de giras interminables, grabaciones, entrevistas y una entrega sin descanso.

Pero lo que más sorprende no es la cantidad de trabajo, sino la ausencia total de espacio para sí misma. "Era todo para la música, todo para la voz, todo para los conciertos, todo... todo menos para mí", confiesa.

Detrás de cada éxito, había una renuncia. La cantante reconoce que su obsesión por hacerlo todo perfecto la llevó a olvidar su propio bienestar.

"Hacía cosas brutales", dice, en referencia a los esfuerzos físicos y mentales que asumía para mantener su nivel artístico.

@vickymartinberrocal Malu se sincera en #asolascon ♬ sonido original - Vicky Martín Berrocal

El resultado fue una autoexigencia tan desmedida que nada le parecía suficiente. "No me valía con nada", añade. Aunque los premios, las giras multitudinarias y los reconocimientos se acumulaban, ella se sentía vacía, incapaz de disfrutar lo que tanto le había costado conseguir.

'He padecido mucho'

"He conseguido una barbaridad de cosas preciosas, pero las he padecido. No las he disfrutado". Una declaración que pronuncia con un tono entre la tristeza y la reflexión, resume toda la conversación.

Es el testimonio de una mujer que ha vivido bajo la presión constante del éxito, convertida en su peor juez.

La cantante española, Malú.

La cantante española, Malú.

Malú reconoce que durante años no supo poner límites ni separar su identidad de su carrera. Su vida era el escenario, y fuera de él, apenas quedaba espacio para descansar, reír o simplemente parar.

La artista no oculta que esa actitud tuvo un coste personal enorme: agotamiento, ansiedad y una sensación de vacío que no se llenaba con aplausos. En su conversación con Vicky Martín Berrocal, confiesa que solo ahora está aprendiendo a reconciliarse consigo misma y a vivir con más calma.

El precio invisible del éxito

El testimonio de Malú conecta con una reflexión más amplia sobre el precio emocional de la autoexigencia, especialmente en mujeres que, como ella, han construido su carrera a base de esfuerzo y perfeccionismo.

Vicky Martín Berrocal, que conoce bien ese mundo de presión constante, escucha sin interrumpir, con la empatía de quien entiende lo que supone vivir bajo la mirada de los demás.

En A solas con, la diseñadora ha logrado algo poco habitual: que figuras públicas se despojen del personaje y hablen desde la vulnerabilidad.

En este episodio, la conversación fluye como un desahogo compartido. Dos mujeres fuertes que, tras años de exigirse demasiado, se permiten por fin ser imperfectas.