Por qué no debemos hacer dietas que no nos enseñan a comer bien: su impacto en nuestra salud

Por qué no debemos hacer dietas que no nos enseñan a comer bien: su impacto en nuestra salud

Actualidad

Por qué no debemos hacer dietas que no nos enseñan a comer bien: su impacto en nuestra salud

Cualquier tipo de dieta restrictiva a base de batidos y polvos son malas para la salud física y mental. 

20 enero, 2023 02:28

Dietas que solo se basan en obedecer y no en enseñarnos a comer no son recomendables para la salud. Entonces, es importante tener presentes las cuatro cosas que que están relacionadas directamente con hacer dieta.

Lo primero de todo es que estar restringiendo alimentos genera una gran ansiedad, y eso no significa que haya que comer de todo a todas horas: Esto no es jauja. Lo que significa es que el tener alimentos clasificados como "malos", como "negativos", como "prohibidos", viviendo en la sociedad en la que vivimos, tarde o temprano va a hacer que tarde o temprano nos los acabemos encontrando.

[Cristina Barrous: “Trabajo para que las mujeres aprendan a alimentarse y a sentirse mejor”]

Porque va a hacer que el día que los tomemos, porque no nos podamos aguantar, "porque he salido con amigas", o lo que sea, de pronto nos vamos a encontrar con que...: "He pecado". Esta frase que oigo tanto en consulta que me pone mala y además esto genera mucha ansiedad, culpa y, lamentablemente, esa carga la acabamos normalmente gestionando otra vez a través de los alimentos, con lo cual volvemos a caer en la trampa. Acabamos comiendo cualquier cosa de mala manera porque no damos con la manera de gestionar esta culpa. Es un poco absurdo.

Impacto de las dietas Sara Fernández

En segundo lugar, las dietas no generan hábitos y cuando no tengo un hábito, lo voy a hacer durante un tiempo y luego lo voy a dejar porque no estoy aprendiendo nada, ¿no? Entonces, es importante que cualquier cambio de alimentación que hagamos siempre esté muy, muy basado en aprender, en incorporar hábitos, en mi día a día: ese desayuno, esa comida, esa cena con los conocimientos que necesito para sentirme bien, para sentirme sana y que no me obsesione con obedecer y repetir como un papagayo.

En tercer lugar: nosotros, los expertos en nutrición, tenemos un concepto que es el metabolismo basal. Es la energía que nuestro cuerpo necesita para hacer a las funciones básicas. El problema es que cuando nosotros hacemos dieta, nuestro cuerpo aprende a hacer lo mismo con menos energía y, por tanto, reducimos nuestro metabolismo basal.

[Cristina Barrous, experta en nutrición, nos descubre qué alimentos nos roban energía en el día a día]

Eso significa que al final, cuando termine la dieta, lo que voy a conseguir es volver a ganar peso, y no porque porque no haya aprendido nada, sino porque solo estoy obedeciendo y porque, encima, mi cuerpo va a aprender a hacer lo mismo con menos energía.

Estos últimos son dos puntos muy importantes que que debemos valorar a la hora de hacer dieta. Siempre tenemos que intentar apostar por herramientas que nos enseñen, que nos ilustren, pero que nos faciliten la vida y que no nos la dificulten más todavía.