Míchel, entrenador del Girona FC, y Christian Costaganna, CEO de Nissan España.

Míchel, entrenador del Girona FC, y Christian Costaganna, CEO de Nissan España.

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Motor

Pasión, innovación y liderazgo: lo que une el mundo del fútbol y el de la automoción

Míchel Sánchez, entrenador del Girona FC, y Christian Costaganna, CEO de Nissan España, reflexionan sobre los puntos en común en cuanto a gestión, filosofía y objetivos que comparten ambos campos.

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Convertir una pasión en tu forma de vida es una aspiración que, más allá de lo puramente vocacional, lleva implícita una labor intensa y de largo recorrido para aprovechar todo el potencial para alcanzar la excelencia. Es así como se forja una carrera exitosa en todo tipo de disciplinas, sea la ciencia, la empresa, el motor o el deporte. Pero, incluso en estas trayectorias de éxito, es posible ir más allá y marcar la diferencia: eso es, precisamente, lo que define el liderazgo, la ejemplaridad en una profesión.

¿Hay una receta, una fórmula mágica para destacar en algo en lo que ya de por sí uno es bueno? Para responder a esta pregunta, y como muestra de que el liderazgo es una cualidad transversal a toda actividad, Nissan ha reunido en el estadio de Montilivi, en Girona, al entrenador del club de fútbol de la ciudad, Míchel Sánchez, y a Christian Costaganna, CEO de Nissan España. Sobre el papel -o el césped, en este caso-, perfiles muy diferentes que comparten haber alcanzado el éxito en sus respectivas profesiones.

La conversación entre ambos revela más puntos en común que pueden ayudar a delinear las cualidades más relevantes para forjar un gran líder. Un presente que, para empezar, comienza con esa pasión, con ese mimo por lo que puede empezar siendo una afición: pongamos el balón para uno, el coche para el otro. “Desde pequeñito siempre soñaba con ser futbolista”, recuerda Míchel. “Cuando a los 17 entrenaba con el primer equipo [del Rayo Vallecano] veo que el sueño se puede hacer realidad, pero hasta esa edad tienes la sensación de que hay que seguir formándose y luchando por tu sueño”, cuenta.

Perseverancia, ganas de mejorar, inconformismo… en el caso de Costaganna, el fútbol también está inscrito en su contexto familiar, pero en este caso su carrera profesional parecía predestinada hacia los coches, como recuerda: “De pequeño estaba muy ilusionado con los coches. Cuando tenía que dibujar algo, dibujaba los coches y sabía todos los precios de los modelos que estaban en el mercado. Quizás por culpa de mi padre, que también le gustaban los coches y porque por la ciudad donde he nacido, Turín, que tiene mucha tradición con la automoción”.

“Moldeamos ideas y desarrollamos talentos”

Actualmente, ambos ostentan cargos que implican tomar decisiones de gestión. Y no solo cuestiones empresariales en el caso de uno o de táctica en el otro, sino en todo aquello que tiene que ver también con las emociones de sus equipos. Empatizar, motivar a las personas y poner en valor el trabajo de cada eslabón de la cadena son algunos nexos entre estas dos concepciones: “Tenemos el privilegio de hacer unos trabajos donde trabajamos proyectos grandes, donde moldeamos ideas y donde podemos desarrollar talentos”, aduce Costaganna. “Así que para mí al final es el trabajo del día a día con ellos, escucharlos, darle espacio para que puedan crecer, puedan crear”.

Desde el banquillo o el campo de entrenamiento, estas palabras reflejan igualmente el sentimiento del entrenador del Girona que, bajo su batuta, alcanzó la pasada temporada el mayor hito de su historia, la clasificación para la Champions League. “Tengo jugadores de 18 años y de 36, pero si tú logras que haya una buena atmósfera de trabajo y si el jugador entiende y nota que le estás haciendo mejor que lo que él está realizando en el terreno de juego, todo el mundo lo valora y le hace mejor futbolista. Él va a estar unido a ti para lo que necesites”, explica Míchel.

Una de las cuestiones a las que se enfrenta esta forma de liderar es la “incertidumbre”, según el entrenador. En el mundo del fútbol, indica, el resultado del fin de semana es lo más visible y, en definitiva, “de lo que depende todo”. Por eso, consciente de que una mala racha puede llevar a su destitución, uno de sus mensajes es que “me focalizo mucho en lo que podemos hacer nosotros, en lo que depende de nosotros, que es que el jugador esté preparado y exigirle al máximo en el día a día. Creo que es fundamental tener un gran ambiente de trabajo y que ellos tengan unos grandes valores profesionales y personales”. “Si todos tenemos muy claro en la cabeza hacia dónde queremos ir, las cosas salen mucho mejor y mucho más fácil”.

Innovación para alcanzar los objetivos

Costaganna y Míchel durante su charla, en el banquillo de Montilivi.

Costaganna y Míchel durante su charla, en el banquillo de Montilivi.

Ganar es importante -imprescindible, “porque si no, tienes problemas”-, pero ese valor que le concede Míchel al día a día es una manera de marcar la diferencia y de cumplir la que entiende como su responsabilidad: “Que mi afición esté orgullosa y se sienta bien representada”. El método, en este caso, también está encaminado a la mejora constante, para lo que la innovación es igualmente clave. Entrenar hoy es muy diferente a como era hace décadas. Pero si la tecnología está cambiando el fútbol por dentro aprovechando toda la analítica sobre el juego, cómo no va a ser igual en el mundo de la automoción.

“Estamos en un mundo que va cambiando muy, muy rápido, así que creo que es fundamental tener esta actitud crítica, en ese sentido positivo, que te permite buscar soluciones y cosas nuevas”, reconoce Costaganna. La innovación se perfila, pues, como uno de los pilares -tal vez el más importante- para el desarrollo y adaptabilidad de toda empresa o actividad. “Ahora vivimos en un mundo que está lleno de datos, y con la inteligencia artificial lo estamos aprovechando para poder coger oportunidades y tomar decisiones rápidas con todo el equipo”.

El año 2024 ha sido muy positivo para los dos protagonistas de esta distendida charla. Como apuntamos previamente, el Girona cerró la mejor temporada de su historia “dando un salto de calidad que nadie esperaba”, con un tercer puesto en la Liga -tras Real Madrid y Barcelona- que le permitió jugar la presente edición de la Champions League. Para Nissan, tal como apunta su CEO en España, supuso un alza en sus resultados del 25%, “entrando en el podium de las tres mejores marcas en crecimiento” en nuestro país. Y tanto en un caso como en otro, resalta Costaganna, “al final nada es mágico, nada viene por por nada. Entonces hay que trabajar, que perseverar, y luego hay que tener positividad y la justa ambición, porque al final hay que ser realistas, pero también tener este nivel de ambición. Con esto, al final los resultados llegan”.

No hay fórmulas para el éxito más allá del trabajo, la constancia y la humildad para desarrollar todo el potencial que uno guarda dentro. Eso es lo que ha convertido a ambas personalidades en referentes en sus respectivas profesiones, en las que este cóctel en el que también cabe la pasión definen posiciones de liderazgo que, como demuestran cara a cara, tienen mucho en común.

Nissan ARIYA: redefiniendo las normas

Como celebración de esta sintonía en cuanto a filosofía personal y por la apuesta por la innovación, Christian Costaganna concluyó el encuentro haciendo entrega a Míchel del Nissan ARIYA, uno de los modelos más disruptivos de la marca japonesa: es 100% eléctrico, tiene una autonomía superior a los 530 kilómetros y está dotado de un diseño minimalista y elegante que combina con la última tecnología de la compañía. Un coche cómodo, versátil, potente y seguro para todo tipo de conductores y todo tipo de usos que redefine el segmento de los Crossover.