Vacunación de un niño en una imagen de archivo.

Vacunación de un niño en una imagen de archivo.

Salud

El VPH, la enfermedad de transmisión sexual más común: "La vacunación es clave para evitar el cáncer"

Expertas de Málaga invitan a las mujeres a participar en el cribado poblacional y a toda la población a protegerse para evitar el contagio de este virus. 

Más información: Alerta en Málaga por el brote de sarampión: expertos insisten en la vacunación para frenar su expansión. 

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La enfermedad de transmisión sexual más común es una de las causas por las que numerosos hombres y mujeres padecen cáncer de cérvix, de vulva, orofaringe, pene, ano o vagina. Pese a que existen herramientas efectivas para prevenirlo, como la vacunación y el cribado, la incidencia del virus del papiloma humano (VPH) sigue creciendo y el 80% de la población va a estar en contacto con este virus en algún momento de su vida. 

Con motivo del Día Internacional de Concienciación sobre el Virus del Papiloma Humano que se celebra este martes 4 de marzo, expertas en el VPH de Málaga consultadas por EL ESPAÑOL de Málaga aseguran que en la mayoría de los casos, el cuerpo elimina la infección sin consecuencias, pero en un pequeño porcentaje de personas, el virus persiste y puede derivar en lesiones precancerosas que, con el tiempo, evolucionan a cáncer. 

El VPH es una enfermedad que afecta tanto a hombres como a mujeres, según Carmen González, ginecóloga. Entre las enfermedades que puede causar este virus está el cáncer de cérvix, pero no es el único. Este virus también está vinculado a otros tipos de cáncer, como el de vagina, vulva, ano, orofaringe y pene.

En este sentido, la experta sostiene que la incidencia de cáncer de orofaringe relacionada con el VPH ha aumentado, especialmente en países como Estados Unidos y algunas regiones de Europa. “Como ahora el uso del tabaco ha disminuido y están aumentando las infecciones de transmisión sexual, las prácticas sexuales de riesgo y el sexo oral, la principal causa del cáncer de orofaringe ya no es el tabaco, es el virus del papilón humano”, explica.

En este punto entra en juego la importancia de la concienciación y el conocimiento de la población sobre el virus del papiloma humano, por lo que hay que trabajar, en primer lugar hay que prevenir la infección, según González. Por ello, un grupo de expertos ha realizado un estudio para conocer hasta qué punto las mujeres conocen el alcance del VPH. 

Tra entrevistar a 1.750 mujeres de toda España, llegaron a la conclusión de que “la mujer tiene un conocimiento de un 7,8 del VPH, pero la nota mejoraba en mujeres que tenían ya la infección, es decir, que habían adquirido el conocimiento una vez que se habían infectado”. 

Por ello, la ginecóloga hace hincapié en que se debe concienciar a la población sobre este tema, empezando por dar a conocer las medidas de prevención. Una medida de prevención es “utilizar el preservativo que protege de la infección en un 70%, pero ni siquiera en el 100% porque protege del cáncer de cuello de útero, pero del de vulva no, ya que el contacto entre genitales sigue existiendo con el preservativo”, explica la experta.

Otro método de protección es la vacunación. “Tenemos un 82% de adolescentes vacunados”, pero hay una parte de la población que no está vacunada. Por ello, invitan a todos los malagueños que no se hayan protegido de este virus, que lo hagan porque “la vacunación les protege frente a futuras lesiones”. 

Asimismo, la experta explica que existen pruebas que detectan lesiones causadas por el VPH, pero solo para las mujeres. No hay pruebas para los hombres. Hablamos de las citologías que detecta el virus, pero cuando ya hay lesión “y con eso evitamos que la mujer llegue a tener cáncer de cuello de útero”. 

En este punto, Marta de la Peña, ginecóloga del Hospital Comarcal de la Axarquía, explica que desde julio se está llevando a cabo un cribado poblacional para detectar este virus y prevenir el cáncer de cérvix. En este participan mujeres de entre 25 y 65 años y, dependiendo de la edad, se hace una prueba u otra. 

A las mujeres de entre 25 y 34 años, el cribado se hace a partir de una citología porque estas mujeres “son las que van a eliminar el virus con más frecuencia y no les va a ocasionar ningún problema”. Por tanto, tomarán una muestra para ver las células y saber si tienen alguna lesión. 

En cambio, a las mujeres de entre 35 y 65 años, el cribado se hace con una prueba para detectar el VPH, ya que en estas edades es más difícil eliminar el virus y “hay un porcentaje un poquito mayor de mujeres que le persiste el virus y que les va a causar algún problema”, según De la Peña. 

Por ello, invita a toda la población femenina a participar en el cribado poblacional del cáncer y remarca que actualmente “tenemos la oportunidad de acudir a una consulta y tomando una muestra de manera indolora, tenemos la capacidad de poder detectar lesiones que si las tratamos vamos a evitar que aparezca en un futuro un cáncer de cérvix”.