Arantxa Balsón es una mujer profundamente inspiradora. Un mujerón del Norte con unos ojos azules que te calan el alma. Hace casi 10 años nos dijo a un grupo de CEO’s de empresas medianas “Nunca viviréis el sueño que no habéis soñado”. Poco después juntamos a los vicerrectores de la Universidad de Málaga y les solté que a mí me gustaría que de nuestra Universidad saliera un premio Nobel, que nuestro Málaga Tech Park fuera de verdad un pequeño Silicon Valley.

Lo conté en Un Chino en el Muelle 1 hace dos años. A mi equipo siempre les participé que aspirábamos a ser los mejores del mundo en lo nuestro y que, de hecho, lo éramos en muchos aspectos. Llámenme optimista, o loco. Siempre pensé que la diferencia entre un loco y un visionario era el éxito.

Hace algo más de un año, dije a mis accionistas que, si querían salir, ese era el momento ya que después de las elecciones norteamericanas podrían suceder eventos adversos para las empresas que fabricaran fuera de EE. UU. Dos años antes les había propuesto implantarnos industrialmente en EE.UU. En pleno COVID trabajamos para tener una producción completamente robotizada en Europa porque la era de la deslocalización industrial tocaba a su fin. En fin, la intuición es la integral de la razón. Acabábamos de abrir nuestra segunda planta en Vietnam.

De ir nosotros a fabricar a China y Vietnam, ahora va Pedro Sánchez a vender. Muy bien. Ya era hora. Para equilibrar la balanza hay que ir a vender. Si no vas y no haces nada, comprar ya compramos y con la guerra arancelaria compraremos más. Hace casi tres décadas fuimos tan audaces que compramos tecnología alemana para hacer en España la mejor red de alta velocidad de Europa, que los alemanes, 30 años después, aún no tienen.

¿Se imaginan ustedes que nos traemos ahora el maglev chino y hacemos el corredor mediterráneo que una Málaga y Barcelona en 3 horas con parada en Valencia? La única forma de no sucumbir ante Tánger Med y el nuevo mega puerto de Nador es unir los puertos del mediterráneo desde Algeciras a Barcelona con sus puertos secos y un corredor ferroviario de mercancías que una la capacidad de todos (Algeciras, Málaga, Almería, Alicante, Valencia, Sagunto, Castellón, Tarragona, Barcelona).

Si cambiamos el Rin por una línea ferroviaria de alta capacidad competimos con Rotterdam. O hacemos algo ya o la fusión del Ártico dejará todos los estrechos calientes del planeta sin uso, desde Malaca a Suez y Gibraltar. Los ríos siberianos cada vez más calientes funden el permafrost y el cabotaje ruso del Ártico es cada vez más una realidad que pone a Rusia en el dominio de la nueva vía rápida marítima mundial. Los Huthies o los piratas somalíes no tendrán a quien atacar.

Nos fuimos a China a vender a los chinos en 2001.

Hablamos mucho del potencial del Sudeste Asiático en Sudesteando. No me voy a repetir. Durante tres siglos, el mayor socio comercial de China fue España, aquella que implosionó con el felón de Fernando VII y el petardo de Godoy, ayudada por la Ilustración anticatólica francesa y la protestantización de nuestro Estado que, con los Borbones, trajo la idea destructiva de que primero está la política y luego la ética, en aquel momento la Religión. Para ello había que cargarse a los Jesuitas y a todo el que no se doblara al interés político.

Carlos III puso la bomba de relojería, era cuestión de tiempo que España se rompiera en una España americana y otra chiquitita, europea. Haberle seguido llamando España fue un error. Debiéramos haberle llamado Hispano Europa para entender que aquella España no existió más, se fragmentó en muchas, todas herederas de una cultura civilizatoria que ponía al Rey al servicio de los súbditos, que eran los que ostentaban la soberanía y que ponían a Dios por encima del Rey y no al revés.

De Dios y Ley Vieja del Carlismo que reacciona a Fernando VII, al nacionalismo, incluido el nacional catolicismo, solo faltaban unas buenas crisis, el romanticismo, la nostalgia de un tiempo anterior y ya lo tenemos. Populismo independentista y populismo indigenista por todas partes incluida Hispano Europa.

Tengo para mí que Locke y Hobbes han hecho, a la larga, mucho daño. Impulsaron, tras el humanismo universalista de Salamanca, una segunda Ilustración, esta inglesa y deísta no anticristiana. El toque hugonote y la influencia ginebrina obró la tercera ilustración, más adanista, francesa y explícitamente anticristiana.

Eso de que el hombre es el lobo del hombre era una constatación de las tierras bárbaras, del norte del limes, pero no universal. Hay muchos hombres buenos, hay mucha caridad, mucho perdón, mucho compromiso con el bien común, mucha humildad, la comunidad por encima del individuo, el altruismo como motor de progreso, la generosidad como soporte de la vida en comunidad. La razón de Estado como bien supremo para el pueblo.

En estos valores, la enorme comunidad hispana, comparte con las comunidades del resto del Sur Global y de las que, en particular, han incorporado el confucianismo en sus culturas. El pueblo Viet, una de las muchas razas y minorías que vivía en China estaba originalmente establecido más arriba, en el sur de la actual China, durante muchos siglos fue feudatario de los chinos y recibió una enorme influencia cultural y religiosa que le llegaba desde India y desde China. Los que hayan visitado el palacio real de Hue o la ciudad comercial de HoiAnn pueden comprobarlo.

Urdaneta estrena el Tornaviaje, la conexión de Hispania vía Nueva España con Filipinas a través de una ruta que llevaba con los vientos desde Acapulco a Manila y desde Manila al Norte de California, bajando luego su costa desde Monterrey hasta Acapulco de nuevo.

Durante tres siglos, el comercio con China de toda la Corona hispánica, el mayor mercado común de todos los tiempos que se extendía desde los presidios de la costa Pacífica hasta la Patagonia y el trocito europeo. Este mercado tenía las mismas leyes, la misma moneda, el mismo idioma… Proveía a China a través de Filipinas de metales preciosos que no tenía, sobre todo plata, a través de la moneda, el real de a 8 que se acuñaba en las cecas de Nueva España.

La primera globalización sucede en el Pacífico. Durante 80 años solo navegado por españoles, muchos vascos y tlascaltecas. El lago español. Fueron mayoritariamente tlascaltecas los que derrotaron a Moctezuma y su reino terrorífico caníbal, fueron tlascaltecas españoles los que llegaron con Urdaneta a Filipinas y ellos defendieron las islas, que libremente se habían sumado a la Corona, de los ataques de piratas japoneses al comercio con China.

Tlascaltecas contra samuráis, ¿se imaginan? El Galeón de Manila, el Galeón de Acapulco volvía cargado de manufacturas chinas, las más avanzadas tecnológicamente, las cerámicas, hechas con los mejores caolines, los más puros con la mayor concentración de alúmina, con procesos de cocción de alta tecnología para su tiempo. Las sedas más finas y los gusanos depurados genéticamente para producir más seda de mejor calidad. Sacar gusanos de China tenía pena de muerte. A Marco Polo estuvo a punto de costarle la vida siglos antes. Lentes, pólvora, hilaturas de seda, mantones, abanicos, peinetas de carey, perlas, joyería fina, herramientas…. venían de China, y acababan en Hispanoamérica y en Hispano Europa. Los mantones de Manila, los abanicos de seda bordados, los más finos encajes, las valiosas especias… Hasta los churros con chocolate son una muestra del rico intercambio comercial, el churro chino con el cacao hispano americano.

El yuan, la moneda china se referenciaba al real de a 8 que circulaba en todo el sudeste asiático como hoy el dólar. Costó a los austriacos más de dos siglos conseguir la tecnología de producción de mercurio que tenían los españoles Almadén para la metalurgia de la plata. Les llevamos maíz, pimientos, tomates, cacao, medicinas, lanas y mantas y hasta las frituras (tempura) con la plata…

Tuve la suerte y el honor de haber establecido la primera fábrica española en Vietnam, en China fuimos de los primeros españoles, pero ya había otros antes que nosotros, Roca Indo, Fagor…

Nunca fuimos a comerciar montando presidios, puertos fuertes en los que guarecernos para no mezclarnos con los locales. Allá donde fuimos nos mezclamos con ellos compartimos idioma, cultura, lecho y fe. Miren el barroco en Filipinas o en Nueva España con querubines negros o indígenas en las iglesias con un Dios padre con penacho de plumas. Hasta el infeliz de Magallanes se dejó la vida en las Molucas en una trifulca de medio pelo entre clanes locales. La vuelta al mundo la dio Elcano, no Magallanes. No nos equivoquemos.

Nunca subimos el Yangtzé o el río Perla a cañonazos como hicieron, en el siglo XIX, aprovechando la implosión económica de la dinastía china por la falta de plata que supuso la implosión de Hispania, otros países que ahora critican a Pedro Sánchez diciendo que comerciar con China es un suicidio. Imagino que los líderes franceses que dicen eso no van a Decathlon, ni a Carrefour ni a Leroy Merlín… Los ingleses que vendieron opio a cañonazos tienen sus centros comerciales llenos de productos chinos y hasta marcas legendarias como MG son el caballo de troya de las ventas de vehículos chinos en Europa.

La visita de Sánchez es oportuna, como lo fue la de Juanma Moreno hace pocos meses. Debemos ir a China a vender, atraer inversiones y a aprender. Ya lo ha dicho el presidente y he disfrutado de saber que dos políticos, serios y altamente cualificados y comprometidos con el desarrollo económico de España, Juan Bravo y Carlos Cuerpo están hablando con frecuencia.

Soy un defensor del modelo de comercio que funcionó desde mitad del siglo XVI, Hispano Europa (la España de hoy) e Hispanoamérica comerciando con China. En aquel momento las dos mayores potencias del mundo comerciando como si no hubiera un mañana. Ellos son la primera potencia industrial, científica, y económica en paridad de compra del mundo. El mayor inversor mundial, la mayor banca, la mayor apuesta por la descarbonización, la mayor comunidad académica, con universidades potentes y programas tipo Fullbright para atraer talento internacional. Yo fiché uno de esos extranjeros brillantes que los chinos se llevaron becados para formarles en su idioma y cultura.

Acaban de anunciar que ya no necesitan a ASML para hacer chips de nodos inferiores a 2nm. Acaban de anunciar que avanzan hacia la fusión con un reactor que arranca el proceso con energía de fisión. Energía infinita y barata. Otro sueño que he soñado.

Establecer relaciones estratégicas privilegiadas, potenciar el intercambio científico y el comercio bilateral es bueno. Pedro Sánchez, como antes Juanma Moreno y otros, van por el camino que ha recorrido Hungría, el primer destinatario de inversiones chinas en campos como la automoción y primera parada europea del Belt and Road.

Los chinos tendrán que fabricar en Europa si quieren vender en Europa. Pues que fabriquen aquí en España. Cuando en la postguerra vinieron las empresas americanas (ITT, Standard Electric, GE, Ford, GM, IBM …) a vender a Europa y España en particular, se les dijo claramente, si quieres vender aquí has de fabricar aquí. Fuimos el primer país europeo que abrazó el uso civil de la energía atómica de la mano de los americanos. Pocos recuerdan que Celestica Valencia, fue IBM, que Fujitsu vino a Málaga a fabricar, que Siemens, Ericsson, Nokia, Teletra, Marconi, Alstom, Bombardier, General Electric, Alcatel… accedieron a nuestro mercado mediante la implantación manufacturera. Al cruzar Tarrasa ves aún una planta de ABB. La Ford y GM fabricaron en la Zona Franca de Cádiz miles de millones en electrónica de automóvil, Cádiz Electrónica y Delphi emplearon a miles. La globalización fue, sobre todo, un gran proceso de desindustrialización a favor de China, que aprendió y superó. La economía de escala de su mercado jugaba a favor. Solo en 2024 ha fabricado 22.5 millones de vehículos superando a EEUU (15 millones) y a la UE (12.5 millones) .

Ir a China con humildad y reciprocidad. Venderle aquellos productos en los que somos buenos (algunas tecnologías, industria agroalimentaria, lujo y perfumes, infraestructuras, tecnología y destinos turísticos, capacidades en defensa y tecnologías digitales…). España ya compra muchísimo a China, es el momento de que consideren masivamente fabricar aquí. Las plantas de COX de hidrógeno verde y electrolizadores son una esperanza, las de coches eléctricos en la Zona Franca también.

La reciprocidad exige cuidado con los lobbies chinos. En China no dejan a las empresas extranjeras ir al Partido Comunista a susurrarles al oído lo que conviene al país. Aquí, lo que conviene a España no lo debe decir ningún lobby extranjero o cambiaremos un lobby americano por otro chino. En algunos sitios, trabajan juntos por alcanzar las posiciones de influencia o poner al tonto útil que necesitan.

Hispano Europa, con las puertas abiertas al comercio y con Mercosur, que los “amigos" franceses no quieren ratificar, con las puertas abiertas a los Hispano Americanos de bien, tiene superpoderes. Inmigración que se integra porque comparte cultura, y trabaja cada día como el que más, muchos de ellos altamente cualificados como los doctores jóvenes que operan en la mayoría de los hospitales privados de Barcelona.

Energía renovable, cultura hospitalaria, un sistema productivo primario (agro, hortalizas, olivo, vino, frutas y cárnicas) y de la industria del lujo, de los más competitivos del mundo y, este año, hasta los pantanos llenos, lo que nos da tiempo para llenar de micro desalinizadoras con almacenamiento de agua en altura y bombeos reversibles toda la costa. Madrid se está convirtiendo en la Miami de Hispano Europa recibiendo a los capitales y empresarios Hispanoamericanos a un lugar que es seguro, amigable y rentable. Nuestras bazas son ser tan europeos como los primeros porque fuimos Roma, y ser tan Hispanos como los primeros porque fuimos Hispania. Comerciar con Oriente, sin cañones, amigablemente, con el ganar-ganar, es nuestra cultura.

Cuando vas a California ves que sus universidades pululaban de asiáticos y chinos. No veo lo mismo por aquí.

Ya me imagino la Cátedra de Cultura Hispánica de mi paisana Elvira Roca llena de chinos y, a ser posible, en Málaga.

Bravo y Cuerpo hacen muy bien en hablar. Los asuntos de Estado deben abordarse entre los mayores partidos. Tenemos que ir a allí otra vez a aprender y hacer más. Las mejores empresas del mundo, en China y EE. UU., están dirigidas por asiáticos, muchos chinos taiwaneses (TSMC, NVIDIA, Huawei, Intel, Xiaomi…) . Algún día nos encontraremos Un Chino en el Muelle1 y viviremos el sueño que nos animó Arantxa a soñar.