El municipio malagueño de Mijas ha vuelto a vivir presa del miedo por otro incendio forestal. Esta vez declarado en el paraje conocido como Majadilla del Muerto, al lado de la carretera AP-7, a la altura de la Cala de Mijas y en concreto en el kilómetro 203, a las 15:35.

La delegada de Málaga en funciones, Carmen Casero, ha activado este martes por la tarde el nivel 1 del Plan de Emergencias del Plan Infoca ante la dimensión del fuego. El Plan Infoca ha informado a las 21:30 de la estabilización del fuego, así como la desactivación del nivel 1 del Plan de Emergencias.

Unos 160 efectivos, ocho medios aéreos, cuatro técnicos de operaciones, tres agente de medioambiente, un técnico de extinción y cinco camiones de bombero han combatido las llamas en la zona desde cerca de las 16:30. Esta noche seguirán trabajando para su control.

El alcalde de Mijas, el socialista Josele González, ha informado en su cuenta oficial de Twitter de que habían desalojado a los vecinos de la urbanización de Vitania a causa del incendio. El Consistorio del municipio malagueño ha habilitado un punto de atención para los evacuados en el Centro Cultural de La Cala. Unas diez personas han dispuesto del servicio.

Muestra de que la situación parece mejorar es que se ha ordenado la reapertura de la autopista AP-7, que fue cortada en ambos sentidos entre los kilómetros 201 y 214 por el intenso humo en la zona.

El Plan Infoca ha informado en sus redes sociales, alrededor de las 16:24 del incendio en el núcleo de la Cala y del envío de dos aviones de carga en tierra, un helicóptero ligero, uno semipesado, un Súper Puma y un Kamov.

Hay que recordar que hace sólo dos días, el Infoca daba por controlado otro incendio forestal en la misma zona. Concretamente a la altura del kilómetro 203 de la AP-7 y provocando el corte de uno de sus carriles.

El impacto del fuego en la provincia es importante, como demuestra el hecho de que en apenas diez días se hayan registrado fuegos en Cómpeta, Algatocín, Cortes de la Frontera (el 23 de julio) y Mijas (controlado el pasado domingo). Este último pueblo ha vivido tres sucesos similares en apenas dos semanas. El más grave, declarado en el paraje de El Higuerón el 15 de julio, afectó a casi 2.000 hectáreas de terreno y produjo el desalojo de 3.065 personas.