
Diseño previsto para la Nueva Rosaleda de Málaga.
La Nueva Rosaleda de Málaga, a contrarreloj para el Mundial de Fútbol 2030: quieren iniciar la obra el verano que viene
La firma del convenio entre las tres administraciones se prevé para julio, pero los trabajos previos ya avanzan para cumplir los plazos marcados por la FIFA.
Más información: La Nueva Rosaleda costará 270 millones: Junta, Ayuntamiento y Diputación aportarán 90,5 millones cada uno
Nadie dijo que asumir el reto de ser una de las sedes del próximo Mundial de Fútbol 2030, que tiene a España como uno de los países organizadores, fuese fácil. Ni barato.
La complejidad de la empresa está obligando a las tres administraciones implicadas en el proyecto, el Ayuntamiento de Málaga, la Diputación provincial y la Junta de Andalucía a exprimir los plazos y a avanzar a contrarreloj.
Así lo confirma el concejal de Deportes, Borja Vivas, quien confirma la compleja hoja de ruta que tiene por delante este extraordinario proyecto, que incluye una inversión estimada de 270 millones de euros.
La operación, de la que se conocen los primeros esbozos, trazados por el estudio Morph, afecta de lleno a la Rosaleda, que deberá ampliar su capacidad hasta disponer de 45.000 butacas, así como al estadio de Atletismo, que, de cumplirse las previsiones, pasará a ser la casa del Málaga CF en agosto de 2026.
"Los plazos van muy justos, no hay margen de maniobra, pero vamos en plazo", asegura Vivas, quien apunta que todo el procedimiento se ha dejado en manos de Promálaga, una sociedad municipal que permitirá agilizar los trámites, evitar cuellos de botella administrativos y acortar tiempos.

La nueva Rosaleda
Un estadio para 45.000 espectadores y una hoja de ruta acelerada
La pretensión de los socios públicos es la de firmar el convenio interadministrativo en las próximas semanas. Ese es el documento clave en el que quedan plasmados los compromisos económicos de cada uno de los actores. En concreto, 90 millones por institución.
Una vez formalizada la rúbrica, Promálaga estará en disposición de poner en marcha el procedimiento de adjudicar a una misma empresa el proyecto en su totalidad.
La firma tendrá la obligación de configurar el plan de ejecución definitivo, respetando las líneas generales ya conocidas, y afrontar los trabajos sobre la Nueva Rosaleda y la ampliación del Estadio de Atletismo.
De acuerdo con las previsiones de Vivas, el planteamiento es que las obras puedan arrancar en el verano de 2026, una vez que el club de Martiricos finalice la temporada y quede liberado el estadio.
Aunque el horizonte final es 2030, la FIFA ha recomendado que el estadio esté disponible a mediados o finales de 2029 para el caso de que España acoja el Mundial de Clubes que actualmente se celebra en Estados Unidos.
Este calendario es algo más benigno que el que a finales del año pasado dibujó el coordinador general de Infraestructuras del Ayuntamiento, quien señaló que las instalaciones deberían estar terminadas a finales de 2028.
Así sería la nueva Rosaleda de cara al Mundial 2030
El traslado al estadio de Atletismo: más complejidad de lo previsto
La mudanza del Málaga al Estadio de Atletismo, mientras se ejecutan las obras en Martiricos, también plantea desafíos técnicos y logísticos. El recinto actual tiene aforo para 7.500 personas y se estudia su ampliación hasta los 26.000 asientos.
Sin embargo, esa actuación implica una obra compleja de refuerzo estructural, además de nuevas autorizaciones del Ministerio de Transportes por el impacto que esta ampliación tendría sobre el tráfico del entorno, en el que se localiza ya el Martín Carpena.
El concejal confirma que se están analizando, de la mano del Málaga también, distintos escenarios. En caso de que no fuese factible ampliar a 26.000 plazas, se optará por una capacidad inferior. En cualquier caso, la premisa evidente es que los trabajos en La Rosaleda tienen que arrancar en el plazo previsto.
Los 270 millones en los que se estima el coste de la operación incluyen la Nueva Rosaleda, la reordenación urbana del entorno, que incluye la construcción de un puente plaza sobre el río Guadalmedina y los trabajos necesarios en el Estadio de Atletismo.
Uno de los interrogantes actuales es si será o no necesario reubicar un instituto localizado en el entorno de La Rosaleda.
La alternativa de un nuevo estadio quedó descartada por falta de tiempo
Aunque en fases previas del proyecto se barajaron localizaciones alternativas para un nuevo estadio (como el Puerto de la Torre o los terrenos de la Expo), esas opciones fueron descartadas por el elevado coste, la necesidad de urbanizar desde cero y, sobre todo, la falta de tiempo.
"No llegábamos. Y el problema de todo esto, que es un poco lo que nos tiene a todos intranquilos, son los plazos", remarca Vivas.
Pese a las dificultades logísticas y administrativas, desde el Ayuntamiento se insiste en que no hay dudas con esta iniciativa. "Quiero ser positivo porque al final es de lo que se trata y las tres Administraciones estamos remando en la misma dirección", valora es importante.