Los trabajadores y los visitantes que acudan este verano al Centro de Arte Contemporáneo (CAC) de Málaga a disfrutar de sus exposiciones volverán a sudar la gota gorda. Porque pese a que el Ayuntamiento de la ciudad vuelve a salir al mercado con el objetivo de contratar a una empresa que repare las deficiencias que desde hace ahora cuatro años se vienen detectando en el sistema de climatización, la realidad es que las taras no quedarán corregidas hasta la parte final del año.

Tras un primer intento fallido, en el que la licitación quedó desierta tras no haber concurrido una sola empresa, ahora el Consistorio activa de nuevo el concurso por un precio inicial de 467.689,96 euros (IVA incluido) y un plazo de seis meses. Las firmas interesadas tienen hasta el 28 de mayo próximo para presentar sus ofertas.

Atendiendo al pliego de condiciones que rige este procedimiento, el encargo parte del área de Cultura. Con la intervención se pretende subsanar las deficiencias detectadas en el sistema de climatización, que fue motivo de un primer informe fechado en noviembre de 2020. En el mismo se analizaba su situación, así como se enumeraban sus principales taras y se proponían actuaciones para su arreglo. 

En este sentido, los documentos municipales reconocen que el CAC presenta diferentes problemas en el sistema de climatización "que impiden garantizar unas adecuadas condiciones de humedad y temperatura no sólo para la comodidad de los usuarios, sino para la conservación y mantenimiento de las obras de arte que allí se exponen y almacenan". Estos problemas también se extienden a la zona de oficinas y otros puntos del centro, "pudiéndose decir que afectan de manera integral a todo el edificio". 

Para corregir esta situación, el proyecto de intervención recoge la instalación de refrigeración, compuesta por dos enfriadoras condensadas por agua, ubicadas en sala técnica en el sótano del edificio. Una de ellas, según se precisa, "se encuentra totalmente fuera de servicio", mientras que la otra presenta fugas de aceite, entre otros problemas.

El almacén de las obras de arte 

Es especialmente ilustrativo del problema lo que sucede con el almacén de las obras de arte, situado en la planta sótano del edificio. El control de humedad y temperatura de esta sección tan sensible del museo se lleva a cabo mediante dos equipos autónomos aire-aire de precisión de la marca Airdata. Son estos dispositivos los que se encargan de regular estas variables. 

El primer escollo con el que se topa el Ayuntamiento es que la empresa fabricante, Airdata, "ha desaparecido", por lo que no se puede acudir a ella para la reparación de los equipos. No obstante, algunos de los profesionales de esta firma se han agrupado en Climtech (PSH Energía), actuando a modo de servicio técnico de estos equipos. 

La unidad 1 de este sistema, "aparentemente se encontraba en funcionamiento, aunque presentaba una señal de error de baja presión en el display del equipo". Y esto implica que, a todos los efectos, no acondicionaba" O lo que es lo mismo, "no climatizaba la sala". En el caso de la unidad 2, "se encuentra fuera de servicio". 

Esto implica que "ninguno de los dos equipos proyectados funcionaba". "No se podían mantener las condiciones de temperatura y humedad requeridas para esta área que tanta relevancia e importancia tiene, dado que se almacenan obras de arte que forman parte del patrimonio del centro y, aunque se encuentran debidamente almacenadas en la mayoría de los casos, deben conservarse con unos valores de temperatura y humedad concretas, pues, en caso contrario, se corre el riesgo de deterioro de estas", se remarca en la documentación técnica.