La Junta de Andalucía se ha visto obligada a dar marcha atrás en la adjudicación inicial del proyecto geotécnico del nuevo hospital de Málaga tras la decisión adoptada por el Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales. El ente autonómico ha dictaminado recientemente la obligación de anular la selección inicial, que dejaba en manos de la empresa Labrum el contrato. 

De acuerdo en las actas oficiales de la mesa encargada del estudio de las proposiciones, el presidente del tribunal ha obligado a retrotraer las acciones al momento previo a la adjudicación, de manera que sean puntuadas de nuevo todas las ofertas con la exclusión de Labrum. Realizado el proceso, la nueva adjudicataria es la empresa Cemosa. 

Su labor es esencial en el futuro del proyecto hospitalario, por cuanto tendrá que velar por que los pilares sobre los que se levante este edificio gigante sean sólidos. Muestra de la envergadura del equipamiento planteado es que se convertirá en el edificio administrativo más grande de Andalucía.

Según el diseño de los estudios de Carlos Lamela y Aidhos, que cuentan con la colaboración de Sener y ARCS, el complejo dispondrá de varias torres de hasta 11 plantas de altura. El estudio ahora adjudicado tiene por objeto determinar las características del suelo sobre el que se levantará el futuro hospital y "juzgar si los terrenos son adecuados para cimentaciones que no supongan una repercusión excesiva en el coste total de la edificación". 

La empresa seleccionada debe describir claramente cuál es el tipo de cimentación admisible, distinguiendo entre cimentaciones superficiales y profundas o especiales. En el pliego se subraya la necesidad de que el número de ensayos, experiencias y análisis por unidad de superficie sea el necesario "para que no puedan admitirse errores en el mismo, de forma que los datos que se obtengan sean ciertos dentro del preciso nivel de probabilidades".

El estudio final deberá definir "con suficiente claridad y precisión" aspectos como la naturaleza del terreno y propiedades geotécnicas; las condiciones de cimentación; la tipología de las cimentaciones; la previsión de asientos o fenómenos de inestabilidad, y realizar recomendaciones constructivas. Asimismo, deberá contener los drenajes, movimientos de tierra, excavaciones, etc., "que puedan ser necesarios para la correcta ejecución de las obras de urbanización y edificación".

Entre la documentación incluida en el pliego están los resultados de una prospección geotécnica de campo y laboratorio realizadas en la parcela destinada al Nuevo Hospital de Málaga y que analizan los diferentes tipos de cimentación posibles. La zona de estudio comprendía apenas una parte de la parcela catastral total en la que se ubica el Hospital Civil. En concreto, 60.000 metros cuadrados frente a los 85.550 metros de todo el espacio.

El equipamiento proyectado contará con 11 plantas en altura y tres sótanos de aparcamiento. Se indica que la cimentación se prevé a una profundidad de 12,5 metros respecto a la cota del terreno actual, si bien se considera la posibilidad de una planta adicional de sótano (cota orientativa -17 metros).

De acuerdo con los datos manejados por la Junta, la construcción del nuevo hospital supondrá una inversión de al menos 380 millones de euros, generando un equipamiento con capacidad para 810 habitaciones, 27 unidades de hospitalización, 108 puestos de día, 42 quirófanos, 198 consultas externas.