Tras muchos años de espera, los vecinos del barrio de Mangas Verdes, en Málaga capital, pueden felicitarse de que por fin la Junta de Andalucía va a retomar el proyecto de urbanización del Sendero del CAU, cuyas obras se iniciaron hace veinte años y que están paralizadas desde 2007. 

Asumido el compromiso por la actual la consejera de Fomento, Marifrán Carazo, de ir adelante con esta iniciativa, el Gobierno andaluz acaban de activar la licitación para contratar las obras de urbanización de la parte pendiente.

Con un valor inicial de 593.000 euros (IVA incluido) y un plazo de seis meses, la intervención permitirá terminar el paseo peatonal que une las calles Panala con Pulgarín Bajo. Entre los objetivos marcados con esta operación destacan la necesidad de "dotar de un nuevo espacio público a la parte alta del barrio de Mangas Verdes, que indudablemente debe mejorar las condiciones de habitabilidad del entorno".

A este primer factor se agrega la apuesta por "poner en valor la presencia del Acueducto de San Telmo, que en cierta manera, actúa como motor de la intervención, e incorpora interesantes aspectos identitarios y de reconocimiento del lugar por parte del vecindario".

Asimismo, el proyecto técnico subraya que dada su situación, con la obra planteada se logrará un espacio desde el que se "permite el disfrute de una vista panorámica
hacia el poniente del norte de la ciudad de Málaga y Ciudad Jardín, por lo que comporta una clara y necesaria vocación de mirador".

Para ello se toma como punto de partida el proyecto básico y de ejecución redactado por el arquitecto Francisco González Fernández. El documento, fechado el 7 de junio de 2021, fue objeto de informe favorable de supervisión, siendo, posteriormente, validado por la Secretaría General de Vivienda. 

El Sendero del Cau es un espacio abierto en el barrio de Mangas Verdes por el que, subterraneamente, discurre una parte del Acueducto de San Telmo, instalación hidráulica construida a finales del siglo XVIII que abastecía de agua a la ciudad mediante una red de puentes, acequias, minas y conducciones enterradas y que estuvo en uso hasta principios del siglo XX. 

Esta estructura fue inscrita en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural (BIC) con la tipología de sitio histórico. La empresa que finalmente sea adjudicataria tendrá que ejecutar la pavimentación, consolidar los bordes, mejorar las infraestructuras básicas existentes (alumbrado, saneamiento de pluviales, red de riego), embellecer el espacio con especies vegetales adecuadas, instalar mobiliario urbano, crear un mirador hacia la ciudad y restaurar el Puente de Melero, inicio del recorrido desde la calle Pulgarín Bajo.