El polémico edificio de viviendas construido en la Alameda Principal de Málaga capital está en el mercado. Según ha podido saber EL ESPAÑOL de Málaga de varias fuentes del sector inmobiliario de la capital de la Costa del Sol, la posibilidad de que la propiedad del inmueble acabe vendiéndolo en su totalidad a un inversor interesado está sobre la mesa. 

De hecho, una de las fuentes consultadas habla de que la suma reclamada puede rondar los 16 millones de euros, mientras que otra admite que en los últimos meses varias empresas y grupos se han mostrado su deseo de adquirir el edificio completo. Si bien muchas de estas propuestas no han convencido a la propiedad, parece que se mantiene abierta una vía de negociación con alguno de los interesados.

El bloque es objeto de no poca controversia desde que recibió la licencia de obras por parte del Ayuntamiento de Málaga a mediados de 2019. Más de tres años después, pese a que el calendario inicial era inferior, la promoción sigue sin estar completada. Aunque todo hace pensar que se encuentra en la fase final, con la posibilidad de que esté rematado antes de acabar el año.

Una de las cuestiones que ha generado polémica es el diseño de su fachada, que genera un evidente contraste con otros inmuebles históricos de la misma acera de la Alameda Principal. El inmueble, promovido por Promociones Irene, S. L., da cabida a 12 viviendas, así como un local comercial en planta baja y aparcamientos en dos plantas de sótano.

Pero el carácter sorpresivo que genera esta iniciativa empresarial no radica sólo en la construcción, adaptada en el exterior a los colores reclamados por la Oficina de Rehabilitación del Centro Histórico, si no también en la personalidad del propietario. 

"Es especial; ni se anuncia ni le gusta que aparezca su nombre", dicen las fuentes. Un hecho objetivo que confirma esta impresión es que lejos de lo que suele suceder con la inmensa mayoría de empresas promotoras, que activan la comercialización de sus viviendas conforme se impulsa la construcción, en el caso del edificio de la Alameda es imposible encontrar una web o una referencia a la que acudir para poder interesarse por el producto residencial ofertado o por sus precios.

Lo que sí asegura una de las fuentes es que, a la espera de lo que pueda ocurrir con la posible venta de todo el complejo, "hay lista de espera interesada en los pisos". Quizás en una o dos semanas, en el supuesto de que no fragüe la posible compra por un tercero, se abran las puertas para que todo aquel que así lo quiera pueda conocer los detalles de las 12 viviendas de la Alameda.