El Ayuntamiento de Málaga capital reabre el melón de la calle Victoria. O, mejor dicho, vuelve a activar la reflexión sobre la posibilidad de mejorar su actual configuración, con la idea de incrementar el espacio reservado para el peatón.

Este movimiento, que viene de la mano de la Gerencia de Urbanismo, recupera una línea de pensamiento que llegó a ser objeto de estudios en el año 2014, pero que quedó en agua de borrajas ante la incidencia que la misma tenía sobre la movilidad del entorno.

Casi siete años después, el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, quiere sondear las posibilidades de intervenir sobre uno de los ejes más populares del Centro histórico. Una tarea que no se antoja nada sencilla y que tendrá que tomar en consideración el impacto que la misma pueda tener sobre el tráfico en general (por la misma pasan a diario cerca de 6.000 vehículos por sentido) y sobre los recorridos de la Empresa Municipal de Transportes (EMT), en particular.

Para ello, ha entablado las primeras conversaciones con el área de Movilidad y con el Distrito Centro, que a su vez ha iniciado ya contactos con los colectivos vecinales. De ello queda constancia en la agenda pública del edil, en la que se recoge una reunión con estos dos departamentos municipales a finales del pasado mes de enero. López no sólo lo confirma, sino que muestra su deseo de avanzar en la cuestión dando voz a colectivos vecinales.

El edil defiende este paso adelante en la necesidad de aprovechar un momento clave el desarrollo de la zona. De hecho, la conexión de la vía de la Merced es uno de los puntos calientes de los movimientos urbanísticos de la capital de la Costa del Sol. 

Ejemplo de ello es la apuesta del Consistorio por levantar un centro cultural vinculado a la danza sobre el solar de los antiguos Astoria y Victoria; el proyecto hotelero promovido por una empresa de Gerard Piqué en la parcela del viejo Cine Andalucía; la intención de impulsar el NeoAlbéniz, o la aspiración a intervenir sobre el túnel de la Alcazaba, mejorando sus actuales condiciones. A estas hay que agregar la reurbanización ya en marcha de la calle Carretería, que tendrá continuidad una vez finalizada con la de calle Álamos.

Todo ello, a juicio de López, invita a retomar la reflexión sobre la configuración de la calle Victoria, de manera que la misma pueda ir en paralelo a las muchas operaciones ahora previstas en su entorno más directo.

El primer plan en el que trabajó el Ayuntamiento en 2014 pasaba por reducir a un solo sentido la circulación rodada en la calle Victoria, pudiendo, de este modo, ganar espacio para el paseo ciudadano. Queda ahora la duda de cuál será la ambición de Urbanismo.

Negativa de la EMT

Lo que sí aseguran fuentes municipales consultadas es que desde el punto de vista de Movilidad se considera "inviable" reducir a un solo sentido el tráfico en este eje, ya que ello tocaría de lleno a la línea 1 de la EMT, una de las de mayor peso en la sociedad municipal.

Sobre el particular, las fuentes aclaran que la previsión es que el departamento dirigido por López pueda presentar alternativas de intervención, de manera que las mismas sean objeto de estudio y análisis. "Lo más que se podría hacer es quitar aparcamientos laterales para ensanchar las aceras y reubicarlos, pero dejar un solo sentido es inviable", añaden las fuentes.

Desde el Distrito Centro, la concejala Gemma del Corral se muestra partidaria de abrir este proceso de análisis. "Nuestra posición es clara y va en la línea de apoyar cualquier mejora de la calle que vaya avalada por los informes de Movilidad y la Gerencia de Urbanismo".