Lo del sector cripto en Málaga está siendo "un pelotazo": "Todo el mundo tiene pequeñas inversiones y está intentando aprender", dice el emprendedor afincado en la ciudad Sergio Palmero Miranda. Es por ello que está impulsando el primer coworking el sector de la ciudad, es decir, un espacio común de trabajo para inversores, emprendedores y trabajadores relacionados con el tema.

Según ha explicado a EL ESPAÑOL de Málaga, su objetivo es dejarse atraer por el efecto imán del Polo Nacional de Contenidos Digitales, donde hay "perfiles tecnológicos, muy innovadores". Y es inminente: plantean tener para finales de octubre o principios de noviembre al menos ya un local. 

Palmero se define como "más que criptofriki, emprendedor" y tiene actualmente en proceso su propio proyecto emergente en el sector, Cripterest, una herramienta con la que monetizar "toda esa información del mundo cripto que ahora influencers y expertos en el sector ofrecen por canales gratuitos" e informales, como Whatsapp, Telegram o Twitter. Y de ahí, el interés por un coworking.

"Hay mucha gente interesada, pero cada uno va por libre. Hay inversores, gente desarrollando proyectos dentro del mundo Blockchain, gente que ha dejado el trabajo para ponerse a investigar... Son perfiles muy diversos que actualmente solo están juntos dentro del canal online: Telegram, Twitter, Discord... No hay nada local", razona.

La referencia está en Valencia, donde unas 45 personas ya están trabajando juntos con distintos proyectos del mundillo. Enumera otros ejemplos: una aceleradora de startups cripto en Madrid, otro coworking del sector en Barcelona, un proyecto de crear algo parecido en Sevilla. Palmero plantea mantener un "tránsito de información" continuo con esas otras iniciativas: mantener un par de reuniones semanales, crear una red de conexión interna o Intranet...

En Málaga, ya se han puesto en contacto casi unas dos decenas de personas dispuestas a trabajar: "Casi todo el mundo dentro del ecosistema emprendedor se interesa en estas cosillas. Me escribió un montón de gente preguntando", relata.

"Hay tanto empresas constituidas como startup como chavales que simplemente puedan tener una idea. Me gustaría que, además de inversores, haya gente que tenga ideas y cree proyectos. Pero esto va de crear comunidad, vamos a empezarlo y ver dónde llega, no lo que nosotros tengamos en mente", desarrolla.

Su planteamiento es superar la idea de compartir oficina solo por tener el alquiler más barato: "Ya que estamos investigando todos, por qué no colaborar y ayudarnos. Si yo me especializo en finanzas descentralizadas, puedo enseñarlo", propone.

"Lo bueno de este mundo es que trabajar de forma conjunta no divide, sino que seguramente venga a todos bien", sentencia. Primer paso: para mediados de este mes, ya quieren tener cerrada la primera lista de gente.

Noticias relacionadas