El Unicaja de Málaga visita este martes (20.30 horas) al Limoges francés, uno de los equipos históricos del baloncesto europeo, con el objetivo de refrendar su racha positiva tanto en la Liga Endesa como en el arranque del 'Top 16' de la Liga de Campeones de Baloncesto (BCL, por sus siglas en inglés), después de su triunfo ante otro clásico como el AEK de Atenas (88-66).

El Limoges es un viejo conocido del conjunto malagueño y su verdugo en la final de la extinta Copa Korac en la temporada 1999-2000, justo un año antes de que el Unicaja alzara el título en dicho torneo, y en esta segunda jornada de la Liga de Campeones, aún muy lejos de duelos de tanta trascendencia, el equipo galo tiene más urgencia por ganar después de comenzar la segunda ronda con derrota ante el Galatasaray turco.

El equipo andaluz está en una excelente dinámica, con cuatro victorias consecutivas entre la Liga Endesa y la competición europea, y busca un triunfo que vaya clarificando las dos primeras posiciones del grupo y de esta manera disputar los cuartos de final de la BCL.

Para el Unicaja son claves los partidos en su pabellón, donde sólo ha perdido en lo que va de temporada frente al Dinamo Sassari italiano y ya sin nada en juego, además de intentar arañar alguna victoria a domicilio, aunque los rivales de su grupo son complicados y más todavía jugando como locales.

Un amplio palmarés ocupa las vitrinas del Limoges, en las que destacan un título de la Euroliga en 1993, una Recopa de Europa en 1998 y la ya citada Korac en 2000. También destacan sus once títulos de la liga francesa, el más reciente en 2015.

El equipo cajista se ha medido en varias ocasiones al Limoges y la última vez que ganó en tierras francesas fue en 2019 en el 'Top 16' de la Eurocopa (77-78), aunque también perdió en dos ocasiones: en la Copa Korac de 2000 (80-58) y en la Euroliga de 2014 (67-64).

Sin embargo, en los tres antecedentes entre ambos en el pabellón Martín Carpena de Málaga, el Unicaja logró un pleno de triunfos, el último de ellos en 2019 (79-72) en la Eurocopa.

El conjunto galo llega al encuentro como sexto clasificado en su Liga y con un balance de 10 victorias y nueve derrotas, tras imponerse al BCM Gravelines Dunkerque.

No es un conjunto especialmente triplista, con una media de 20 lanzamientos intentados y 6,7 convertidos, pero sí destaca en el juego interior, con un buen 55,6 por ciento de aciertos en lanzamientos de dos, y también es un equipo que carga bien el rebote ofensivo, al igual que los cajistas, con casi 10 por encuentro.

El técnico del Unicaja, Ibon Navarro, tendrá la baja del alero Jonathan Barreiro, con una distensión muscular en la pierna izquierda que le impidió jugar en la pasada jornada de la Liga Endesa ante el Valencia Basket, por lo que viajará a Limoges el joven escolta Mario Saint-Supéry para cumplir con la obligación de inscribir en el acta a cinco jugadores de formación.