No cabe ninguna duda de que con los tres puntos en el zurrón la semana se hace más llevadera y la cabeza está más despejada para prepara el siguiente partido. Pero Sergio Pellicer tiene por delante unos cuantos días para pensar cómo arma su equipo para despedir el año en La Rosaleda contra el Algeciras después de varios reveses en forma de bajas este fin de semana antes y durante el partido contra el Mérida en el que el Málaga CF se impuso por 1-2. 

En la previa del choque del estadio Romano José Fouto llegaron los jarros de agua fría con los diagnósticos de Juan Hernández, que se retiró lesionado en la primera mitad contra el Eldense en la Copa del Rey, y de Manu Molina, caído el sábado antes de viajar a Mérida. Ambos sufren lesiones musculares. El Málaga informó el mismo domingo por la mañana que "Juan Hernández padece una rotura en bíceps femoral cabeza larga de la pierda derecha. Manu Molina, por su parte, sufre una rotura en el vasto externo del cuádriceps de la pierna derecha". Más de un mes de baja cada uno. Por supuesto adiós a 2023. Tampoco llegarán a tiempo para el frenético arranque del año con la jornada del 2 de enero y la eliminatoria de Copa del Rey en el fin de semana de Reyes.

Dani Lorenzo será otro que no podrá despedir el año con las botas puestas. El centrocampista marbellí vio la quinta amarilla en la segunda mitad del choque contra el Mérida y es baja para recibir el domingo al Algeciras en La Rosaleda a partir de las 20.00 horas. 

Estos dos nombres unidos a la baja que ya está convirtiendo en eterna de Sangalli, más la ausencia de Ramón, que no va a reaparecer ya hasta 2024 -los plazos de recuperación en el Málaga no los explica nadie- , vuelven a dejar la sala de máquinas bajo mínimos. 

Solo está la cien por cien, y hay que tocar madera, Genaro. Juanpe acumuló minutos tanto en Copa del Rey como este domingo en Mérida, donde jugó toda la segunda mitad, pero todavía le falta ritmo para ser el jugador que se espera que sea. De momento, se ha pasado la primera vuelta entre dos aguas con las lesiones y la falta de continuidad cuando volvía a estar disponible. En liga solo ha sido titular en tres ocasiones. 

Con esta situación, Pellicer puede tener el as de Izan Merino bajo la manga. El canterano mostró mucha personalidad contra el Eldense en Copa del Rey y podría estar ante su oportunidad de debutar en liga, ya que en Mérida no tuvo minutos.

Son las tres piezas que tiene el técnico de Nules para armar el centro del campo blanquiazul, de las que puede tirar a la vez o guardar alguna en el banquillo en función de cómo transcurra el encuentro. Solo le queda un partido a un nefasto 2023 para el Málaga CF, y Pellicer tendrá que afinar bien en el once para despedirlo con una alegría a la sufrida y fiel afición blanquiazul.