El Málaga CF cerró la primera vuelta del curso este domingo con un bagaje muy pobre, que lo obliga a una gesta visto lo visto en el campo para mantener la permanencia, pero con buenas sensaciones tras la victoria contra el Alavés, dejando la portería a cero. Con esos tres puntos, los blanquiazules encaran la segunda parte de la temporada con otra perspectiva. Y en este tramo, La Rosaleda será clave. 

Como en la primera vuelta, en la segunda el Málaga jugará veintiún partidos, y once de ellos serán en el estadio de Martiricos, por el que ya han pasado casi todos los gallos del corral, que son unos cuantos en Segunda División. 

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En este primer tramo del campeonato el Málaga solo suma cuatro victorias, y tres de ellas han sido en La Rosaleda. Aunque la primera costó que llegara. No fue hasta la jornada 11 contra el Lugo, casi un año después de la última. 3-2 y sufriendo. Las otras llegaron contra la Ponferradina y contra el Alavés el pasado domingo, las dos por la mínima, 1-0. Y 13 de los 19 puntos que lleva el equipo de Pepe Mel los han conquistado en su feudo. 

Eso sitúa a La Rosaleda, y a la afición, como un elemento clave para que el Málaga salga del agujero en el que lleva toda la primera vuelta, salvo dos jornadas, que no es otro que los puestos de descenso. 

Además, varios de los principales favoritos al ascenso ya han pasado como visitantes por el verde malagueño. Las Palmas, Granada, Eibar y Alavés ya se han medido al Málaga en su estadio, con un balance de cuatro puntos para los malaguistas. De los nombres que están en la pomada, Levante y Burgos son los que faltan por visitar al Málaga delante de su gente. 

Aunque muchos de los equipos que tiene que recibir el Málaga son históricos del fútbol español, empezando por el primero, el Tenerife, contra el que juega el sábado 7 de enero a partir de las 18:00 horas. 

Por este orden, Burgos, Oviedo, Zaragoza, Racing de Santander, Levante, Leganés, Cartagena, Huesca, Mirandés e Ibiza son los equipos que desfilarán por La Rosaleda hasta el fin de semana del 28 de mayo, fecha de la última jornada de Liga. 

A la afición poco se le puede pedir, que no se rinde y acude cada partido al estadio, que es el cuarto con más afluencia de la categoría a pesar de llevar penando toda la temporada en puestos de descenso, arrastrando el decepcionante curso anterior. Pero tiene que ser el manido jugador número 12 para llevar en volandas a los suyos y que el equipo saque el máximo de puntos posibles. 

Son 33 puntos los que habrá en juego en el feudo malaguista en estos once partidos. El Málaga CF tiene que sacar el máximo posible porque los números dicen que se puede permitir pocos fallos. 

El 7 de enero, contra el Tenerife, La Rosaleda tiene que volver a ser un fortín.