Con la llegada de septiembre el renovado patronato del Carnaval de Málaga está moviendo fichas de cara al próximo mes de febrero. Una de las últimas novedades es que se reunió con la Federación Malagueña de Peñas hace unos días para explicar la situación y realizar un acuerdo de colaboración que resultó firmarse con éxito.

Los peñistas acordaron en su Junta de Gobierno su adhesión al manifiesto de reconocer a este nuevo patronato como válido para la realización de un carnaval de Málaga democrático. Esta colaboración supone varios puntos a favor para la fiesta.

Entre los beneficios del acuerdo, está se va a realizar un listado de peñas que sirvan como locales de ensayo para los grupos que no tengan, la existencia de la posibilidad de patrocinio, actividades carnavaleras durante todo el año o fiestas carnavaleras en los barrios durante los días laborales de la semana de la calle, algo muy pedido por todos los carnavaleros.

Así, hace unos días la Asociación de Carnavaleros Malagueños, en colaboración con la Asociación de Autores y el apoyo de casi una treintena de grupos presentaron a la ciudadanía un escrito donde reiteraban su decisión -tomada el pasado 9 de marzo- de "no participar en ninguno de los actos organizados por los integrantes no elegidos en asamblea de la Fundación Ciudadana del Carnaval de Málaga en 2023". 

28 agrupaciones (murgas, comparsas e incluso cuartetos) en principio, que ya son más de una treintena, de la provincia de Málaga e incluso de Granada, han firmado ya a favor del manifiesto. Algunas de ellas no iban a salir el próximo año igualmente, pero apoyan la propuesta del resto de sus compañeros "por un carnaval más democrático y justo". Todos ellos aprueban, por tanto, el nuevo patronato, presidido por Diego Flores.

[Órdago en el Carnaval de Málaga: 28 agrupaciones no participarán si no se reconoce su patronato]

Del mismo modo, indicaron en el comunicado que mantendrán los ensayos, continuarán preparando los repertorios y los forillos para "dar a Málaga su carnaval vivo de crítica, alegría, ironía y diversión".

Las voces y el futuro

En esta revolución carnavalera hay nombres ilustres de nuestra fiesta como Carlos Pariente, vicepresidente de la Asociación de Autores. Pariente se muestra contento y agradecido con el apoyo que está teniendo el movimiento. "Tenemos un proyecto en común, el patronato ha entrado con muchas ganas. Tenemos ganas de aglutinar ideas de todo el mundo, sumando colectivos sociales, cuántos más mejor a esta causa. El último, la Federación Malagueña de Peñas", explica. Pariente insiste en que la base de todo es que haya un cambio real en el carnaval. "Ya sea desde las instituciones o de una manera más independiente", matiza.

Así, lamenta que este movimiento haya tenido que crearse pese a todo. "Esto se podía haber evitado, el panorama sería mucho más halagüeño si en marzo cuando empezamos todo este movimiento, esta pequeña revolución carnavalera, desde el actual patronato se nos hubiese contado la verdad de cómo estaba la situación, que ya la conocían y nos engañaron en varias reuniones", expresa. De igual forma, asegura que "algunos del actual patronato eran desconocedores de lo que estaba ocurriendo y de los papeles que se habían intentado mandar al protectorado de la Junta de Andalucía y de cuál era la verdad del patronato". 

Por su parte, Carlos Pasky, otro de los aficionados más destacados de la fiesta, también se muestra feliz del camino que lleva esta revolución. "Estamos trabajando muchísimo, yo creo que la gente no es consciente de que tenemos muchísimas cosas ya armadas por y para el carnaval trabajando mucho. Solo para hacer ese carnaval democrático nos hemos liado la manta a la cabeza", cuenta.

Desde Alhaurín, Dede Cortés, otro autor ilustre de la fiesta, lamenta no haber podido acudir a las reuniones y asambleas de la temporada de verano por su trabajo en el sector del turismo. "Por mi situación personal y laboral no he podido estar para opinar o debatir pese a formar parte del colectivo, pero he estado pendiente de los pasos que se han ido dando", declara.

Pese a ello, Dede valora cómo compañeros de la fiesta se están "partiendo la cara" por los objetivos del manifiesto planteado en marzo, pero le entristece que la situación de la gestión del carnaval haya derivado en lo que hay ahora mismo en el entorno del Carnaval de Málaga. "En mayo percibíamos que había entendimiento para aunar fuerzas entre ambas partes y construir un patronato y un carnaval mejor, el objetivo primordial de todos. Han pasado tres meses y han surgido más trabas y problemas. Estamos dando una imagen al exterior que me provoca tristeza, aunque esto sea lo de menos", dice.

Cree que lo más destacable de este movimiento es que por primera vez los carnavaleros "no nos hemos conformado con que llegue el concurso y hagamos una letra contra algo o contra alguien". "Antes se nos iban los huevos por la boca y luego en Semana Santa se nos olvidaba todo. Hay gente que está luchando por buscar las mejores opciones", añade.

Como deseo, Cortés espera que "la situación se deslíe y se arregle pronto". "Ojalá encontremos un punto de encuentro, aunque parezca difícil. Como autor quiero un carnaval fuerte, construido con cimientos fuertes y renovado. Cuanto menos ruido externo haya, mejor", sostiene. 

Sobre esto, Pariente asegura que se están dejando la piel reuniéndose prácticamente semanalmente para montar un proyecto que ve complicado que se pueda mostrar en febrero, pero que "no hay duda de que en dos o tres años el proyecto se hará realidad y tendremos el carnaval que creemos que todos los carnavaleros merecemos: libre, democrático y con mucho futuro, el que Málaga merece".