La primera vez que se habló de poder ir en tren desde Málaga a Marbella fue a mediados del siglo XIX. A lo largo de todo este tiempo se han presentado diversos estudios y, por ahora, nunca han fructificado. Pero es más que evidente que esa infraestructura es necesaria -Marbella es la única localidad española de más de 100.000 habitantes que no está conectada por tren- y se acaba de presentar un nuevo estudio -elaborado por Arcs y Analistas Económicos de Andalucía- que demuestra que sería viable y rentable hacer un corredor ferroviario hasta Marbella.

Ese informe ha sido presentado hoy a los alcaldes de Málaga, Torremolinos, Benalmádena, Mijas, Fuengirola y Marbella así como al presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado. Todos lo apoyan y la intención es trasladarlo al Ministerio de Transporte para poder ponerlo en marcha. 

¿Qué dice este estudio? A grandes rasgos que es factible hacer una conexión ferroviaria hasta Marbella, que tendría un coste de entre 2.500 y 2.700 millones de euros sin IVA, que se podría ir desde el aeropuerto de Málaga hasta Marbella sin paradas en 22 minutos y que tendría una demanda potencial anual de entre 34 y 46 millones de viajeros. 

En estos últimos años se ha hablado de varias opciones. Una de ellas era crear la línea ferroviaria en la parte norte de los municipios ante la escasez de suelo pegado a la costa. El ingeniero José Alba, director de la consultora Arcs, desecha esa posibilidad porque no la ve útil. Defiende que el tren se haga junto a la costa, creando nuevos túneles o junto a la carretera en aquellas zonas en las que sea posible. "Entre La Cala de Mijas y Las Lagunas tiene que ir un túnel sí o sí porque no se puede pasar de otra manera", ha asegurado. 

En cualquier caso, tanto Alba como Francisco de la Torre, alcalde de Málaga, y Francisco Salado, presidente de la Diputación -que han participado en la presentacion de este informe-, han dejado claro que esto no es un proyecto sino un estudio y que, de llevarse adelante, habría que hacer un trabajo más pormenorizado, estudios de impacto ambiental, etcétera. 

Habría que construir 47 kilómetros de línea nueva y, a priori, se establecerían estaciones en Aeropuerto, Torremolinos, Benalmádena, Fuengirola, Las Lagunas, Mijas La Cala, Las Chapas, Hospital Costa del Sol y Marbella. La idea es que esas estaciones sean ejes modulares y se pongan en servicio autobuses para trasladar a la población hacia ellas y crear aparcamientos para dejar el coche e irse en el tren. Según este estudio, hacer esta infraestructura supondría un ahorro de 600 millones de euros a la provincia en accidentes, pérdidas de horario, etcétera. 

¿Se hará, no se hará? Todo el mundo es consciente de que es necesario y este estudio arroja una serie de parámetros económicos elaborados por los expertos de Unicaja que avalarían su creación. Pero lo importante, como ha dicho claramente Salado, es que haya "voluntad política y se pongan los recursos sobre la mesa".

Si todas las administraciones, independientemente del partido que las gobierne, van a una habrá tren a Marbella. Si se enmarañan unas con otras será un proyecto eterno. Desde el punto de vista técnico, Alba asegura, en un escenario optimista, que el tren podría estar funcionando en 2032. Cuatro años para trámites administrativos y cuatro años de obras. Pero hay que ver si hay acuerdo político. 

"Queremos que este informe sea un reactivo para que empiece a moverse porque si no pones ideas sobre la mesa no se debate nada", ha afirmado Salado. "Son números sólidos y con este tipo de informes tiene más fuerza", ha subrayado De la Torre, quien ha defendido que "hay que tener claro que el tren tiene un papel esencial en la Málaga metropolitana".