Pedro Sánchez ha pasado en Málaga este viernes y sábado con motivo del Congreso Socialista Europeo, celebrado en el Palacio de Ferias y Congresos del 9 al 11 de noviembre.
Desde su llegada, se ha encontrado con el apoyo de los socialistas, que este viernes le vitoreaban a gritos de "¡Presidente, presidente!", pero en gran medida, se ha topado de bruces con la oposición de decenas de manifestantes en contra de la amnistía, sobre todo en la jornada del viernes frente a la Subdelegación de Gobierno, cuando se vivieron grandes momentos de tensión impulsados por los grupos neonazis, que trataron de encabezar la concentración.
Este viernes, Pedro Sánchez tenía una reunión a las 8,15 horas en el interior del Palacio de Congresos de Málaga. Allí se ha reunido los primeros ministros de Dinamarca, Malta, Rumanía, y, de nuevo, con el canciller alemán.
Sobre las diez, estaba previsto el inicio de la jornada de clausura del congreso, donde él ha intervenido pasadas las 10.30 horas. Aunque en el interior la sensación era muy positiva y Sánchez se ha visto respaldado por los suyos, en el exterior, a 500 metros, pues el congreso estaba totalmente blindado, unas 150 personas se han manifestado con una decena de furgones de la Policía Nacional rodeándoles. "Ese furgón, para Puigdemont", cantaron.
Así, desde algunas carreteras malagueñas se pudieron ver grandes pancartas donde se pedía a Europa que frenara la amnistía.